Ecologistas denuncian la muerte de 19 cigüeñas electrocutadas en Marchena (Sevilla)

Sevilla, 23 jul (EFE).- Ecologistas en Acción ha denunciado ante el Seprona de la Guardia y Civil y la Delegación Territorial de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul en Sevilla la electrocución de diecinueve cigüeñas blancas (Ciconia ciconia) en un poste eléctrico de Endesa en Marchena (Sevilla).

Según un comunicado de la organización medioambiental, el poste se encuentra en la Cañada Real de Sevilla-Granada que discurre por el término municipal de Marchena (Sevilla), funciona como Centro de Transformación con número de matrícula 20412, y es propiedad de Sevillana de Electricidad (Endesa).

Aunque en el poste se han incorporado medidas correctoras como aislamiento de cables e incluso un paraguas antiposado, esta organización ha denunciado que las medidas han resultado "insuficientes e incluso mal diseñadas dada la querencia de las aves por esta localidad" sevillana.

De hecho, ha apuntado que ya se habían detectado mortandades de aves en sus inmediaciones. Sin embargo, no se había llegado a estos niveles de mortandad con 19 ejemplares de cigüeña blanca en el suelo y otro más electrocutado en la parte de arriba del poste, detrás del transformador.

Esta elevada mortandad de ejemplares de especies protegidas es un "atentado a la conservación de la Naturaleza que exige una rápida respuesta de la administración y de la empresa propietaria de la instalación", ha sostenido Ecologistas.

La cigüeña blanca es una especie protegida a nivel estatal, europeo e internacional y se incluye en distintos convenios o normativas que velan por la protección de la fauna, como son el Catálogo Nacional de Especies Amenazadas y el Catálogo Andaluz de Especies Amenazadas.

Para esta organización, este caso demuestra que las medidas de protección frente a electrocuciones en tendidos y postes no pueden ser genéricas y ha reclamado un seguimiento de los tendidos para seguir detectando puntos negros como este poste y ajustar las medidas correctoras al uso que hacen las aves de cada uno, incluido el soterramiento de aquellos en los que se demuestre que cualquier otra medida de protección no funciona.EFE

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