Madrid, 19 jul (EFECOM).- El nuevo presidente de Anfac, Josep María Recasens, ha dicho este viernes que Occidente debe ser humilde y aceptar que China es mejor que Europa en materia de vehículo eléctrico porque "van una generación por delante", y "sólo" ha pedido que haya "justicia e igualdad" a la hora de competir.
En su primer discurso a los mandos de la patronal de fabricantes, Recasens ha defendido que "quien niegue el vehículo eléctrico está negando el progreso", si bien cree que la clave ahora pasa ser neutrales tecnológicamente porque, a día de hoy, no hay ninguna opción que responda al trilema de contar con soluciones limpias, con un suministro garantizado y accesibles para el cliente.
Durante su comparecencia ante los medios, el también director de Estrategia del Grupo Renault y presidente-director general de Renault Group España se ha referido a los coches eléctricos como "único factor de crecimiento, generación de valor, empleo y tecnología".
Por ello, España "tiene que dar una respuesta clara y rotunda de que quiere apostar" por esta carrera y por ser líder en nuevas tecnologías asociadas o "perderá el tren", lo que afectaría negativamente a los ciudadanos y su bienestar "sin olvidar que está en juego todo el tejido industrial".
Mención especial ha dedicado a la posición de China. "Hay que aceptar, como occidentales, que en el vehículo eléctrico y conectado van una generación por delante. Son siete años de vehículos", ha recalcado.
Desde su punto de vista, "hay que ser humildes" y asumir esa realidad porque "son mejores que nosotros", ha dicho Recasens, que ha aseverado que al sector, por su ADN, la competencia le "encanta" y le motiva para "mejorar".
Eso sí, en igualdad de condiciones, porque "se trata de jugar con justicia, con las mismas reglas de juego", que es "un poco lo que ha hecho la Comisión Europea" tras meses de investigación, una labor que se ha plasmado en el incremento de los aranceles a los eléctricos procedentes del país asiático.
En opinión de Recasens, el sector tiene que hacer frente a varios retos de forma simultánea porque "las recetas del pasado no son más válidas para el futuro". Estos son la descarbonización, la digitalización, la volatilidad de los precios, la escasez de materias primas y la transformación de la fuerza laboral.
También el "tsunami regulatorio", y es que mientras que en China, por ejemplo, se regula a largo plazo, las disposiciones europeas "paralizan" a los fabricantes y los obliga a gestionar hasta una decena de normas, lo que "hipoteca" recursos de las compañías.
"La regulación está para crear valor, no para prohibir", ha incidido.
Para el presidente de Anfac, que los socios de la patronal han elegido por unanimidad para los próximos dos años, España tiene que ganar en soberanía tecnológica, para lo cual deberá ganar escala.
Y es que en un país donde la cuota del eléctrico puro no llega al 5 % -en Europa ronda el 15 %- "es muy difícil que nazcan empresas, 'start-ups' (empresas emergentes) o unicornios asociados" a este producto o a sectores adyacentes.
"Esto va de producir coches pero, sobre todo, de generar valor y dominar la tecnología. Si hace 40 años fue capaz de crear el milagro del automóvil y ha llegado a ser el segundo productor europeo y octavo mundial, tiene que dar una respuesta clara y rotunda de que quiere apostar por el eléctrico", ha enfatizado.
Por lo pronto, España cuenta con la formación, el coste laboral y una energía "asegurada, limpia y competitiva", lo que supone una "palanca de oro para hacerse fuerte" en la movilidad eléctrica.
A corto plazo, Recasens entiende que hay que seguir incentivando la compra del vehículo eléctrico, y se ha congratulado de que el Gobierno haya prorrogado el Plan Moves III hasta finales de este ejercicio.
"Estamos convencidos de que el año próximo seguiremos en esta senda", ha indicado con optimismo, para después reconocer que se precisa, asimismo, de una red de recarga con capilaridad suficiente como para dar tranquilidad al usuario.
Pero más allá de los estímulos públicos y de la relación con el Ejecutivo, con el que ya está tratando de agendar un encuentro, "hay que tomarlo como una corresponsabilidad colectiva", porque el automóvil "no puede ser el único responsable de la descarbonización de la economía y de asegurar el crecimiento del vehículo eléctrico".
Así, ha invocado a otros sectores, como el energético, el digital y el financiero, que desempeñan una función fundamental para "generar valor, tecnología y servicios en España".
Recasens se pone como plazo "de aquí a fin de año" para "ver claridad en las medidas más cortoplacistas" y comprobar si la llamada a la participación colectiva "es bien recibida".
La automoción, por su parte, se pone "al servicio del país" para generar una diferenciación tecnológica en Europa con un liderazgo 'made in Spain', para que estas soluciones "se desarrollen en España y puedan exportarse fuera de sus fronteras". EFECOM
smv/ltm
