Samuel Navalón corta, con entrega, la única oreja de la novillada de apertura

Guardar

Nuevo

Paco Aguado

Valencia, 18 jul (EFE).- El valenciano Samuel Navalón cortó, a base de una sobrada entrega, la única oreja concedida hoy en la novillada de apertura de la Feria de Julio de Valencia, en la que se anunciaba una terna con la alternativa prevista para los próximos meses.

Pero fue Navalón el que logró sacar mejor balance con un demasiado desigual encierro de Núñez de Tarifa, que además estuvo muy falto de raza, sin entrega y muy a menos a lo largo su lidia, que tuvo la excepción, al menos, de un tercero que, sin excesiva codicia, repitió y se desplazó largo ante los engaños de quien, a la postre acabaría siendo el triunfador de la tarde. Y no solo por esa solitaria oreja.

Y es que el novillero de Áyora, aunque "hecho" en Albacete, desplegó toda su tauromaquia sin guardarse nada desde que se impuso en el tercio de quites a su compañero Jarocho en el segundo novillo y recibió luego a ese primero de su lote con dos faroles de rodillas, misma postura con que prologó su trasteo de muleta.

La dóciles, largas y nada apretadas arrancadas del utrero le sirvieron para ligarle tandas de creciente reposo por el más potable pitón derecho, cómodo y crecido el novillero en todo momento, incluso en los adornos, los remates y los alardes finales, ante un público entregado que le hubiera pedido una segunda oreja de no mediar un pinchazo previo a la estocada corta con que el de Núñez dobló.

Luego Navalón tuvo el mérito de recibir con otras tantas largas a portagayola a los tres utreros que salieron al ruedo en sexto lugar, dos de ellos devueltos por falta de fuerza y defectos de vista. Finalmente, se acabó lidiando un segundo sobrero terciado y casi moribundo, sin fuerza ni raza algunas, que le negó la buscada salida a hombros porque lo pudo sacarle nada en claro pese a las pausas y al temple con que intentó ayudarle.

El también valenciano Nek Romero se despidió sin gran brillo de novillero de la primera plaza de su tierra, de la que salió lanzado el pasado año y donde tiene anunciada la alternativa para el próximo mes de octubre. Con todo, dejó ver su ya buen oficio con un primero que no paró de soltar cabezazos y al que dejó tocar los engaños en pocas ocasiones hasta que el animal se afligió.

El cuarto tuvo buenas y largas embestidas de inicio con las que Romero se lució de capa, pero tras exigirle después de abrir de rodillas la faena de muleta, el utrero acabó por desfondarse casi por completo, obligando al torero de Algemesí a meterse en la corta distancia para intentar apurar lo poco que quedaba. Lo peor de su actuación llegó, en ambos, a la hora de matar.

También falló Jarocho con la espada en el segundo, evitando así la posibilidad de haber paseado algún trofeo por una faena vistosa en la que incluso tomó las banderillas para clavar con desigual ajuste. Le faltó celo al novillo, aunque tomó mejor los engaños por el pitón izquierdo, por donde el burgalés le toreó, igual que por el derecho, con desapasionada y ligera facilidad.

Aun así, en un descuido de colocación y cuando ya quería rajarse, el de Núñez de Tarifa le prendió y el campaneó violentamente en varias ocasiones, con más aparatosidad que consecuencias directas. No logró desquitarse después con el quinto, algo basto de hechuras y muy desclasado, con el que no llegó a confiarse ni a apretarse, por más que el utrero no desarrollara malas intenciones.

-------------------------

FICHA DEL FESTEJO:

Seis novillos de Núñez de Tarifa (el flojo y terciado 6º como sustituto de un titular devuelto por descoordinación de cuartos traseros y de otro sobrero con síntomas de reparado de la vista), la mayoría sin gran ofensividad en las cabezas, terciados los tres primeros y con más cuajo o alzada los previstos en los últimos lugares. En general, de muy poca raza y entrega en los engaños, aun a pesar de la movilidad de algunos. El de más opciones fue el tercero, que repitió y se desplazó sin excesiva codicia.

Nek Romero, de negro y oro: bajonazo (silencio); pinchazo y pinchazo hondo (ovación tras aviso).

Jarocho, de purísima y oro: estocada baja atravesada que asoma y estocada honda trasera desprendida (ovación); estocada tendida desprendida (ovación).

Samuel Navalón, de teja y oro: pinchazo, estocada corta y descabello (oreja); estocada corta (ovación).

Primer festejo de la Feria de Julio, de casi tres horas de duración, con media entrada en los tendidos (unos 5.500 espectadores), en tarde-noche de temperatura agradable. EFE

pa/fp

Guardar

Nuevo