Fallece Teófanes Egido, el fraile ilustrado que reveló el linaje converso de Santa Teresa

Guardar

Nuevo

Roberto Jiménez

Valladolid, 17 jul (EFE).- El historiador y fraile carmelita Téofanes Egido, especializado en el siglo XVI del que fue un gran conocedor y que documentó el linaje judeoconverso de Santa Teresa, ha fallecido este miércoles en Valladolid a los 88 años, en la ciudad de la que fue el primer cronista oficial de la democracia.

Catedrático emérito de la Universidad de Valladolid, Egido (Gajates, Salamanca, 1936), rastreó en el Archivo de la Real Chancillería de Valladolid un pleito de hidalguía del que a mediados del siglo XX se hizo eco el escritor y académico Narciso Alonso-Cortés, hasta demostrar la ascendencia judía de la monja reformadora.

Egido y Lutero

Además, Teófanes Egido también dedicó a Martín Lutero buena parte de sus investigaciones, tradujo sus obras al español y junto al estudio de figuras claves del XVI como Teresa de Jesús, San Juan de la Cruz, Carlos V y Felipe II, labró nuevas perspectivas de interpretación.

Estudió Filosofía y Letras en la Universidad de Valladolid, donde se licenció en 1965 y leyó su tesis doctoral, en 1970, sobre la relación entre la opinión pública y el poder durante el siglo XVIII, antes de ser profesor adjunto, titular y desde 1989 catedrático de Historia Moderna, Contemporánea y de América.

Historia de las mentalidades

Desde su cátedra se erigió en España como uno de los referentes de la historia de la mentalidades, otra forma de analizar la historia o corriente historiográfica para explicar el pasado desde ángulos diferentes como la filosofía, el derecho, economía o sociología, que en su caso aplicó a estudios sobre la Inquisición, el protestantismo y la piedad popular.

Pero también se detuvo en el erasmismo español, la influencia de las tesis luteranas en la España imperial y teocentrista de Carlos V y Felipe II, con un profundo conocimiento del que se sirvió el escritor Miguel Delibes para fundamentar su novela "El hereje" (1998).

En 2001, después de su jubilación y tras ser nombrado catedrático emérito de la Universidad de Valladolid, el Ayuntamiento le nombró cronista oficial de la ciudad, el primero de la última etapa democrática iniciada en 1975.

Su empeño como docente, investigador e historiador adornaron el palmarés del Premio Castilla y León de Ciencias Sociales 2020, que le acreditó públicamente, una vez más, como maestro de historiadores.

Obras suyas son, entre otras, "El linaje judeoconverso de Santa Teresa. Pleito de hidalguía de los Cepeda", "Las claves de la Reforma y Contrarreforma (1517-1648) y "Los jesuitas en España y el mundo hispánico". EFE

rjh-lss

Guardar

Nuevo