El PP deja solo a Vox en el Consell de Mallorca al votar una moción para oponerse al reparto de menores migrantes

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El PP no ha apoyado en el Consell de Mallorca una moción de Vox que pretendía que la institución, en la que ambos gobiernan mediante un pacto, se opusiera al reparto de menores migrantes no acompañados entre Comunidades Autónomas. La moción se ha debatido en el pleno del Consell en una jornada en la que Vox ha convocado a su Comité Ejecutivo Nacional, tras dar por rotos los pactos de gobierno con el PP en las comunidades autónomas a raíz del acuerdo de reparto de migrantes desde Canarias. La iniciativa adquiere especial relevancia en el Consell puesto que es quien gestiona las competencias sobre menores en la isla. El PP ha propuesto a Vox una modificación del texto introduciendo algunos matices, pero los de Santiago Abascal no la han aceptado. La portavoz 'popular', Núria Riera, pedía a su homólogo de Vox, Toni Gili, que admitieran la redacción alternativa si les "preocupa realmente" el debate migratorio. Lo contrario, le ha advertido, supone "un debate político sin contenido". El texto propuesto por el PP rechazaba "cualquier imposición en la distribución de menores extranjeros no acompañados", exigía "atender la realidad de Mallorca" como "ruta migratoria consolidada" y reclamar "medidas para priorizar la seguridad", según ha resumido Riera. Al votarse el texto original, el PP se ha abstenido dejando a Vox en minoría frente a los votos de la izquierda. Gili ha criticado al PP por plegarse a "las imposiciones de Pedro Sánchez" y ha asegurado que los suyos se niegan "rotundamente a aceptar las directrices del PP en la institución insular". El portavoz de Vox ha relacionado "la inmigración ilegal descontrolada" con la delincuencia: "Muchos de ellos tendrán como único objetivo realizar actividades delictivas sobre aquellos a los que les acogen", decía Gili. El conseller de Vox también ha negado que estos migrantes vengan "de países en guerra", o que pasen "hambre en sus hogares": "Simplemente son unos cómplices voluntarios de la extorsión de unas mafias cuyo único objetivo es reconquistar Europa con el vientre de sus mujeres", ha declarado. Los representantes de la izquierda han afeado a Gili estas palabras y han instado al PP a posicionarse frente al "chantaje" de Vox. La consellera de MÉS Rosa Cursach ha tachado de "infame" la moción por "estigmatizar y criminalizar a los adolescentes". Por su parte, la portavoz socialista, Catalina Cladera, ha advertido al presidente, Llorenç Galmés, de que tiene "un problema grave de estabilidad de gobierno". Precisamente, en el bloque de preguntas al equipo de gobierno, antes de debatir la moción, el PSIB instaba a Galmés a romper con Vox antes de que lo hagan ellos. "¿De qué lado está Galmés? ¿Está a favor del discurso del odio, de la xenofobia y el racismo, o está a favor de mantener su silla?", lanzaba Cladera. El conseller de Presidencia, Toni Fuster, es quien le ha contestado, apelando a los resultados de las elecciones para afirmar que los mallorquines "quieren este pacto" entre PP y Vox.

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