Barcelona, 8 jul (EFE).- ERC celebrará el próximo viernes, día 12, una ejecutiva nacional, seguida de un consejo nacional, que analizará el informe elaborado por el responsable de Cumplimiento del partido sobre el caso de los carteles denigratorios contra los Maragall, tras saberse que esta campaña salió de las filas de la organización.
Así lo ha anunciado este lunes en rueda de prensa la portavoz de los republicanos, Raquel Sans, que se ha remitido a lo que se decida ese día y ha evitado de esta forma entrar este lunes en más detalles sobre el caso.
Hace una semana, una investigación periodística del diario Ara reveló que los carteles denigratorios contra los hermanos Maragall que aparecieron durante la campaña de las últimas municipales en un contexto de malas perspectivas electorales para el candidato de ERC, Ernest Maragall, fueron impulsados desde el propio partido.
Ese mismo día, Sans apuntó, sin citarlo, hacia el exdirector de Comunicación de la organización: dijo que en cuanto se tuvo conocimiento de los hechos se le había apartado de sus "actividades laborales", sin señalar que ERC le asegura desde entonces un sueldo como asesor en la Diputación de Barcelona.
Esta persona, próxima al expresidente del partido Oriol Junqueras, asegura que solo actuó como intermediario, pese a ser señalado directamente por Ernest Maragall. De hecho, la investigación indica que la de los Maragall fue solo una acción más de las campañas comunicativas que ERC lleva a cabo escondiendo sus siglas y de forma externa.
Posteriormente, el jueves, Sergi Sabrià, mano derecha del presidente catalán, Pere Aragonès, y persona cercana a la secretaria general, Marta Rovira, anticipó su salida como viceconseller de Estrategia y Comunicación del Govern entre críticas a Junqueras.
Este fin de semana, ERC ha asegurado que "en ningún caso" ha hecho pagos para silenciar la acción denigratoria contra los Maragall (los carteles hacían alusión al alzheimer que padece el exalcalde y expresidente de la Generalitat Pasqual Maragall) y que tampoco ha elaborado "facturas falsas" para intentar justificar el abono de estas cantidades, reaccionando así a una información de La Vanguardia según la cual el partido pagó 50.000 euros por el silencio de los jóvenes que llevaron a cabo la operación.
Sans sí ha evitado este lunes aclarar si Junqueras, entonces presidente del partido, fue conocedor de lo sucedido, cosa que él niega. Ha reiterado que sí lo supo "la dirección", de la que ella entonces no formaba parte, y ha dicho no poder precisar quién lo sabía y quién no.
En cualquier caso, de esclarecer el asunto se encargará el responsable de Cumplimiento, Xavier Mombiela, que fue nombrado en su día por la Ejecutiva nacional. Su informe lo analizará la comisión ética, una suerte de "comité de crisis" que elevará sus conclusiones a la Ejecutiva nacional, todo ello en un momento en el que la fractura entre la dirección y los partidarios de Junqueras es ya más que evidente. EFE
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