El blanco y rojo comienza a adueñarse de Pamplona pese a la lluvia

Guardar

Pamplona, 06 jul (EFE).- El blanco y rojo comienza a ser el color dominante en Pamplona, pese a la lluvia, en las horas previas al lanzamiento del chupinazo que dará inicio a los Sanfermines 2024.

Con miradas al cielo, a la espera de que la lluvia respete el ansiado momento del lanzamiento del cohete, los pamploneses fieles a la costumbre cogen fuerzas con los típicos almuerzos sanfermineros, aunque en esta ocasión, a cubierto.

La lluvia y sobre todo las tormentas están siendo las protagonistas en estas horas previas hasta el punto que este viernes obligaron a suspender, "por seguridad de los intervinientes", el festejo inaugural de los Sanfermines, cuando solo se llevaban lidiados dos novillos de la ganadería navarra de Pincha.

Durante la noche las tormentas han continuado, dando lugar a cielos nubosos y lluvias puntuales durante las primeras horas de la mañana, lo que no ha impedido que, tanto quienes acudían a trabajar como quienes se disponían a comenzar ya las fiestas, salieran de sus casas de blanco impoluto, a la espera de anudarse al cuello el pañuelo rojo a las doce del mediodía.

Las previsiones de la Agencia Estatal de Meteorología anuncian cielos nubosos para esa hora en una jornada en la que las lluvias podrían volver por la tarde. EFE

mg/pss

Guardar