Los hoteleros no perciben sentimiento negativo en España hacia los turistas

Guardar

Nuevo

Madrid, 2 jul (EFECOM).- Los hoteleros no han notado en España un sentimiento negativo hacia los turistas, según la patronal Cehat, que considera que la llamada turismofobia es un problema social y no del sector porque no se han acompasado los aumentos de población a mejoras en las infraestructuras, entre ellas la vivienda.

El presidente de la Confederación de Hoteles y Alojamientos Turísticos (CEHAT), Jorge Marichal, ha presentado este martes en rueda de prensa un estudio elaborado por PWC sobre las perspectivas turísticas para el verano, que apuntan a que sigue el tono positivo del año pasado.

Marichal ha explicado que el aumento de la turismofobia se debe, en parte, "a la situación política" del país y de algunos de los destinos más demandados. En 2017, ha añadido, no había ningún problema y ahora sí, "porque el centro de poder es diferente".

Ha puesto el ejemplo de Canarias, donde un 60 % de la economía y el empleo depende del turismo, pero donde el incremento poblacional no ha ido acompañado de la creación de las infraestructuras necesarias.

No obstante, no todos los destinos tienen los mismos problemas, ya que hay lugares como Huesca, que es la segunda capital menos visitada de España, según el secretario general de Cehat, Ramón Estallela, que están deseando captar turistas.

El sentimiento de los turistas hacia España, según el estudio elaborado por PWC para Cehat, "se resiente" algo, aunque Estalella, "no hemos notado que España tenga un sentimiento negativo hacia los turistas".

Este sentimiento más moderado se debe a que "cuanto más caros seamos menos atractivos seremos", ha dicho Estalella, que considera que España ha pasado de ser "el país de las vacaciones baratas al país de las vacaciones buenas".

Las perspectivas para el verano son positivas debido, en parte, a la mejora de la estabilización del entorno macroeconómico, con menos tensiones en los principales emisores de turistas a España, y a la estabilización de los tipos de cambio.

También ayuda la recuperación de las cifras de empleo entre los emisores, salvo en el caso de Reino Unido, más volátil, lo que anima las perspectivas de los turistas.

Igualmente, la estabilización de los precios respecto al año anterior, aunque todavía crecen a niveles superiores al 3 %, contribuye en las decisiones de gasto de los turistas.

Con todo ello, la ocupación en los hoteles está un 5 % por encima de 2019 y eso se traslada a precios más altos y mejores rentabilidades, una evolución que se nota tanto en los destinos peninsulares como en las islas, según el socio de PWC Cayetano Soler.

Así, el RevPAR -el ingreso por habitación disponible, que aproxima mejor la rentabilidad del sector- crece a un ritmo del 9,5 %, con mayor impulso en el mercado internacional, donde mercados como el norteamericano pesan ya un 8 % en el conjunto de los turistas que llegan a España.

El aumento de la conectividad aérea explica también el dinamismo del sector, con crecimientos no solo en las compañías 'low cost', sino también en las tradicionales, reflejo de una demanda dinámica y de que los viajeros siguen aumentando su apuesta por España.

Los destinos con mayores alzas respecto a 2023, según las cifras de PWC, son Madrid y Baleares, aunque el verano no es la temporada más potente en la capital.

"Si España está de moda, Madrid todavía mas", según Jorge Marichal, debido al aumento de la oferta cultural, gastronómica y deportiva, entre otras.

En este sentido, Madrid es la segunda ciudad en toda Europa con mayor incremento de la inversión hotelera, solo superada por Londres, y ha doblado el número de hoteles de cinco estrellas en 10 años. EFECOM

eb/jmj

Guardar

Nuevo