ERC pone en marcha la maquinaria para su decisivo congreso nacional del 30 de noviembre

Barcelona, 29 jun (EFE).- El consejo nacional de ERC ha aprobado este sábado el primer reglamento para el 30 congreso nacional del partido, que tendrá lugar el 30 de noviembre y en el que un censo de 8.700 militantes decidirá quién toma las riendas de la organización, en plena convulsión interna tras el batacazo del pasado 12 de mayo.

Ese 30 de noviembre se elegirá la composición de la nueva ejecutiva nacional del partido: Oriol Junqueras, que abandonó la presidencia de la formación el pasado 10 de junio, pretende volver a asumir su liderazgo, mientras que otra parte de ERC -entre ellos la secretaria general, Marta Rovira, el presidente catalán en funciones, Pere Aragonès, y buena parte del actual Govern y de la actual dirección- considera que se debe dejar paso a nuevos rostros.

Tendrán la última palabra, principalmente por vía telemática, los aproximadamente 8.700 militantes de ERC, que ya se habrán pronunciado previamente sobre un eventual acuerdo de investidura si el equipo negociador que coordina Rovira alcanza un pacto con el socialista Salvador Illa o con Carles Puigdemont (aunque en su caso las posibilidades son más que remotas).

De hecho, si finalmente se diera una repetición electoral, este congreso nacional se celebraría en plenas nuevas negociaciones para la formación de un Govern. Fuentes del partido señalan que la fecha del 30 de noviembre es inamovible.

El congreso se convocará formalmente el 7 de octubre; hasta el 15 de ese mes se podrán presentar precandidaturas; el 15 de noviembre se validarán las listas -necesitan obtener el apoyo de un mínimo del 5 % de la militancia para oficializarse-; y las votaciones tendrán lugar el 30 de noviembre.

Cada candidatura estará compuesta por 28 personas, a partes iguales hombres y mujeres, y ese mismo día los militantes escogerán a 30 consejeros nacionales, que se presentan a título individual y también serán designados con un criterio de paridad de género.

En el caso de que ninguna de las listas para la ejecutiva nacional alcance más del 50 % de los apoyos, las votaciones se repetirán 15 días después, con margen suficiente para que alguna de las candidaturas se retire o para que alcancen eventuales ententes entre ellas.

El proceso congresual, sin embargo, no concluirá hasta mediados de febrero, ya que la dirección elegida el 30 de noviembre deberá plantear una nueva hoja de ruta política y estratégica que no se someterá a validación hasta entonces.

Este será el tercer congreso en el que la militancia podrá participar de forma electrónica -ya fue así en 2019 y 2022-, lo que sumado al actual cisma interno augura que la participación puede ser mayor con relación a la media.

La candidatura de Junqueras se da por supuesta -ya ha iniciado reuniones con los militantes con este fin- mientras que entre los más afines a Rovira -que ha dicho, igual que Aragonès, que dará un paso atrás después de este congreso- no se vislumbra a día de hoy un rostro que pueda dar la batalla.

Junqueras y Rovira han liderado ERC desde 2011, un tándem que se rompió el pasado 15 de mayo al renunciar el primero a la presidencia del partido, para buscar un aval renovado de la militancia, al constatar que la mayoría de la dirección consideraba que se debía apartar. EFE

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