Trabajan con el caballo de las Retuertas en Doñana para garantizar su conservación

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Huelva, 28 jun (EFE).- La Estación Biológica de Doñana (EBD-CSIC) trabaja, a través de la ICTS Doñana, en garantizar la conservación del caballo de las Retuertas, una de las razas más antiguas de Europa, de gran valor ecológico e histórico, que en la actualidad se encuentra en peligro de extinción.

    Este caballo encuentra su refugio en el Espacio Natural de Doñana, donde se calcula que, a día de hoy, sólo hay unos 260 ejemplares viviendo, dentro de las reservas biológicas de Doñana y del Guadiamar, fincas gestionadas por la EBD-CSIC, según ha informado la entidad en un comunicado.

Varios estudios genéticos realizados durante la primera década de los 2000 desvelaron que estos caballos constituían una raza diferente a la del caballo marismeño, más antigua y primitiva que esta; fue en 2013 cuando se consiguió su reconocimiento oficial como raza autóctona y en 2016 se incluyó en el Catálogo Oficial de Razas de Ganado de España.

Los caballos de las Retuertas viven en libertad en Doñana, completamente asilvestrados, y no reciben otra alimentación que la que pueden encontrar en el campo; se trata de una raza robusta y resistente, adaptada a las condiciones climáticas y de inundación de las marismas de Doñana.

Una de las tareas encomendadas a la ICTS Doñana es la conservación de las razas de ganado autóctono, tanto caballos como vacas, propiedad del CSIC. Además de conservar las razas, al tratarse de ganado, se tiene que realizar una gestión para cumplir los requerimientos sanitarios y mantener una carga ganadera dentro de los límites autorizados en cada finca.

Para ello, una vez al año, el equipo de la ICTS Doñana realiza una serie de tareas de identificación y revisión de los ejemplares de caballos que habitan en las reservas.

Primero se capturan los animales y se introducen en toriles y, a continuación, de manera individual, se identifica a los animales que ya cuentan con microchips, mientras que a los nuevos ejemplares, se les marca con el símbolo de un lince, que los identifica como pertenecientes a la EBD-CSIC, y se les coloca un microchip.

Además de esto, el equipo extrae sangre de cada uno de ellos para analizar su estado de salud y les realiza un control de peso; este año se han identificado 55 nuevos ejemplares.

El objetivo principal de la gestión de esta raza es su protección como raza en peligro de extinción; hasta ahora los caballos de las Retuertas sólo se han estudiado genéticamente, pero existe mucha información disponible para realizar interesantes estudios sobre el comportamiento social de los animales en condiciones de semilibertad.

Por otro lado, el número de caballos de las Retuertas está en la actualidad al límite de la carga ganadera autorizada en las reservas del CSIC, según lo impuesto por criterios ecológicos.

La Estación Biológica de Doñana, lamentablemente, se ve obligada a deshacerse de ejemplares todos los años y la única salida que a veces queda es la de la venta para cebadero por un insignificante precio o la del matadero.

     Esta, sin embargo, no es la solución más apropiada para la conservación de la raza; una de las medidas más adecuadas podría estar en línea con un proyecto que se realizó hace alrededor de una década en la Reserva Biológica de Campanarios de Azaba, en Salamanca, donde, en el marco del proyecto europeo Rewilding Europe, la EBD-CSIC colaboró con la Fundación Naturaleza y Hombre para introducir alrededor de cuarenta ejemplares de esta raza.

De este modo, se podría garantizar la supervivencia de la raza en el caso de que algún desastre afectara a la población de Doñana. EFE

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