El acusado de causar un accidente con tres muertos asume su imprudencia, según su abogada

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Ciudad Real, 24 jun (EFE).- La abogada del joven de 25 años que provocó un accidente en Argamasilla de Alba (Ciudad Real), cuando el coche que conducía bajo los efectos del alcohol y las drogas chocó con otro vehículo en que viajaban cinco jóvenes, ocasionando la muerte de tres de ellos, ha afirmado que su cliente "asume su imprudencia", pero "ni es un ogro ni una mala persona".

Lo ha dicho este lunes en la primera sesión del juicio con jurado que se celebra en la Audiencia Provincial de Ciudad Real para juzgar al acusado, que reside en la provincia de Badajoz.

El acusado se enfrenta a una petición de pena de 5 años y 10 meses de cárcel por parte de la Fiscalía, que le atribuye tres delitos de homicidio imprudente grave por conducción temeraria, y otros tres delitos de lesiones también por imprudencia grave, y además le pide indemnizar a las víctimas y a sus familiares con una cantidad superior al medio millón de euros.

Gema Pozuelo, abogada del acusado, ha manifestado ante el tribunal del jurado que su cliente ha pedido perdón "varias veces" y que todo lo que ocurrió el día de los hechos fue "un desgraciado accidente" que se debió "al ímpetu de juventud".

"Él ya tiene su penitencia porque la imagen de los fallecidos y los heridos no se le irá nunca de la cabeza", ha dicho la letrada, quien ha asegurado que lo que ocurrió en la madrugada del 6 de junio de 2021 en Argamasilla de Alba ha pasado factura a su cliente, que ha intentado en varias ocasiones "lesionar su vida".

También ha subrayado que el acusado "asume su imprudencia", pero ha agregado que "ni es un ogro ni es una mala persona".

Los hechos que se juzgan ocurrieron a las 2:19 horas del 6 de junio de 2021 en el casco urbano de Argamasilla de Alba, cuando el procesado conducía a gran velocidad por una calle que tenía como límite 30 kilómetros por hora y tras saltarse un ceda el paso impactó de frente contra el lateral del otro vehículo a una velocidad de 94 kilómetros por hora.

El choque provocó el desplazamiento violento de ese vehículo, ocupado por los cinco jóvenes.

El resultado fue el fallecimiento de una menor de 16 años y dos jóvenes de 20 y 21, y también resultaron gravemente heridos otros dos ocupantes del segundo coche, dos chicas de 19 años, y la acompañante del acusado, de 18 años.

En esta primera sesión, el fiscal ha calificado la conducta del acusado de imprudencia grave, si bien ha dicho que "no tenía intención de chocar" contra el otro coche, por lo que procedería que se le declarara culpable de los delitos de homicidios y lesiones por imprudencia grave.

Las abogadas de la acusación particular, por su parte, han puesto de manifiesto que las pruebas de alcoholemia y de consumo de drogas a las que se sometió al acusado, y los posteriores informes periciales, demuestran que conducía drogado y a una velocidad un 60 por ciento superior a la permitida en la calle donde se produjo el accidente.

Estas abogadas han expuesto que el joven conducía con "desprecio por la vida de los demás y por la propia suya" y han afirmado que ponerse al volante bebido y borracho y conducir a esa velocidad saltándose un ceda el paso y un cruce, sin intentar frenar, así lo reafirma.

Por otro lado, han destacado que el acusado era consciente de que iba bebido, drogado y a gran velocidad, por lo que "no fue un accidente", ya que incluso tomó esa calle para evitar un posible control de alcoholemia de la Guardia Civil. EFE

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