Madrid, 9 abr (EFE).- El precio del oro, uno de los activos considerado refugio en tiempos de incertidumbre, ha registrado este martes un nuevo récord, cerca de los 2.357 dólares la onza, gracias a la compras de los bancos centrales, las tensiones geopolíticas, y la incertidumbre sobre la política monetaria.
El precio del oro ha alcanzado los 2.356,92 dólares a las 9.15 de este martes, y ha superado así los máximos históricos que tocó en la madrugada del lunes, cuando se situó en 2.353,95 dólares, según datos de Bloomberg.
Tras encadenar varios máximos históricos desde mediados de febrero, el analista de XTB Manuel Pinto, explica que la principal duda ahora mismo es hasta dónde puede llegar el precio del oro si finalmente la Reserva Federal de EE.UU. (Fed) decide recortar los tipos de interés en los próximos meses.
El analista de IG Sergio Ávila considera que la subida del oro es "una señal de que los inversores están buscando refugio ante la incertidumbre económica".
La solidez del mercado laboral estadounidense ha sembrado las dudas sobre cuando empezará la Fed a bajar los tipos de interés.
El presidente de la Reserva Federal de Mineápolis, Neel Kashkari, planteó la semana pasada que, si la economía resiste y la inflación no cede, quizás no sería necesario recortar los tipos este año.
"Los inversores están ahora pendientes de las próximas comunicaciones de la Fed, incluyendo las actas de su reunión de marzo y los discursos de sus funcionarios, que podrían ofrecer nuevas pistas sobre los posibles recortes de las tasas de interés", añade Ávila.
En su opinión, "los movimientos en los precios del oro serán un termómetro importante para medir la temperatura de la confianza inversora y la dirección de las políticas monetarias".
Además de estos factores coyunturales, los analistas siguen apuntando a las compras sostenidas de oro físico por parte de los bancos centrales, sobre todo el de China.