Toledo, 20 mar (EFECOM).- La Unión Española Fotovoltaica (UNEF) ha abogado por potenciar la energía bioagrovoltaica en España a través del establecimiento de un objetivo país a alcanzar a través de este tipo de proyectos, y generando un sistema de incentivos y ayudas públicas que incorpore investigación y apoyo a la I+D+i.
Durante la jornada organizada por la asociación sectorial mayoritaria de la energía solar en España, y celebrada este miércoles en Toledo, UNEF ha puesto en valor a la bioagrovoltaica, que aprovecha una superficie de terreno tanto para obtener energía solar como productos agrícolas, siempre generando un beneficio mutuo.
De acuerdo con el informe, pionero, presentado en la Escuela de Administración Regional, esta práctica todavía se enfrenta a una serie de barreras y retos a pesar de posicionarse como una herramienta "fundamental" para revertir la situación del campo español.
Y es que, según el panel de expertos que ha intervenido en la sesión, la agrovoltaica supone una doble fuente de ingresos para los propietarios de terrenos agrícolas en un momento de crisis del sector.
Eso sí, estos profesionales han coincidido en que, ahora mismo, "falta conocimiento", por lo que entienden que antes de legislar -sólo Cataluña cuenta con una normativa que se inspira en la alemana- y hacer números, hay que aprender y ser conscientes de lo que todo conlleva.
En su intervención de apertura, el director general de UNEF, José Donoso, ha reiterado su interés por ir más allá y avanzar hacia la bioagrovoltaica, fruto de la integración de una "agricultura ecológica, limpia" que se compatibilice con las plantas fotovoltaicas.
De cara a garantizar su despegue, UNEF considera que España debería establecer un objetivo de megavatios (MW) a alcanzar a través de proyectos de bioagrovoltaica, así como generar un sistema de incentivos y ayudas públicas que incorpore aspectos de investigación y apoyo a la I+D+i.
También debería apostar, prosigue, por la generación de nuevos modelos de negocio y mecanismos de financiación para la bioagrovoltaica, como puedan ser las subastas, y mejorar la aceptación y el conocimiento social sobre los beneficios de implementar sistemas fotovoltaicos en combinación con actividades agrícolas.
No menos importante sería compatibilizar las ayudas de la Política Agraria Común o PAC con estos proyectos, a fin de definir sinergias entre la regulación agraria y la generación fotovoltaica.
En términos de difusión, UNEF plantea construir espacios de encuentro entre agricultores y promotores para compartir información, capacitar y socializar los beneficios de los proyectos.
Desde la asociación insisten en que el desarrollo de proyectos de energía solar supone "una oportunidad" para revitalizar los territorios que forman parte de la España rural.
Conforme a sus cálculos, un ayuntamiento que alberga una planta fotovoltaica percibirá un ingreso anual de, en torno, a 10.000 euros por MW instalado en los diez primeros años de la instalación.
Si además la planta cuenta con un proyecto de agricultura ecológica, el valor compartido con la comunidad aumenta todavía más.
Estos ingresos, que a su vez pueden utilizarse para cofinanciar proyectos Feder que doten de mejores y mayores servicios a las zonas rurales, "ayudan a mejorar la calidad de vida de sus habitantes y atraen a nueva población", ha subrayado Donoso.
A lo largo de la jornada se ha expuesto, además, un caso de "éxito", el proyecto de agrovoltaica 'WineSolar', ubicado en la localidad toledana de Guadamur, y las bodegas González Byass.
En la actualidad, los viñedos del Grupo Emperador, de la mano de la iniciativa de Iberdrola, se han convertido en la primera planta agrovoltaica inteligente de España.
Esta instalación fotovoltaica permite adaptar la disposición de los módulos a las necesidades de las viñas, para regular mediante la sombra de los paneles la incidencia del sol y la temperatura.
La razón de ser no es otra que conseguir una "mejora de la calidad de la uva", lo que permitiría un uso más eficiente del terreno, reduciría el consumo de agua de riego y redundaría en una mejor resistencia de este cultivo a las condiciones climáticas ante el aumento de las temperaturas, ha explicado el responsable de proyectos especiales de Iberdrola Renovables España, Alexander Arias. EFECOM
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