El Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) ha elevado de 16 a 20 y de 20 a 23 años de prisión las penas a las dos gemelas condenadas por asesinar al novio de una de ellas en Sabadell (Barcelona) en 2021, con la pena más alta para la entonces pareja de la víctima. En una sentencia consultada por Europa Press este martes, el tribunal ha optado por alzar las penas tras la vista de apelación que celebró la semana pasada para valorar los recursos que se habían interpuesto contra la sentencia que dictó la Audiencia de Barcelona en consonancia con el veredicto del jurado que juzgó el caso. Los magistrados han descartado los recursos de las defensas y han estimado parcialmente los recursos de las acusaciones, y de la misma forma que han aceptado aumentar las penas de las dos hermanas también lo han hecho con el tercer condenado por el crimen, el cuñado de la víctima, cuya condena pasa de 17 a 20 años de cárcel. La primera sentencia impuso penas en la parte más baja de la horquilla por el delito de asesinato con alevosía (excepto a la pareja, con agravante por parentesco) porque tuvo en cuenta que un posible móvil del crimen fue "acabar con lo que creía que eran malos tratos" que supuestamente infringía la víctima a su pareja pero que no se probaron en el juicio. El magistrado de la Audiencia de Barcelona aplicó un atenuante por este posible móvil, pero el TSJC recalca que el jurado no tuvo en cuenta estos supuestos malos tratos en su veredicto y que no se probaron, y zanja: "Lo relevante es que nunca podría premiarse la decisión de acudir a la vía de los hechos en lugar de solicitar el auxilio policial y judicial". LOS TRES PARTICIPARON El TSJC sí da por buena la parte de la primera sentencia que relata los hechos probados y por los que se atribuye a los tres condenados un delito de asesinato. En este apartado, un jurado de la Audiencia de Barcelona constató que la madrugada del 10 de julio de 2021, el cuñado de la víctima le asestó "varios golpes con una palanca metálica" en la cara y el cráneo, y lo siguió agrediendo mientras él trataba de huir, llegando hasta el rellano del piso inferior, donde finalmente murió. Después, las gemelas (pareja y cuñada de la víctima) envolvieron el cadáver en una manta e intentaron limpiar las manchas de sangre y masa encefálica del suelo.