FELGTBI+ aplaude que la Iglesia acepte la bendición de parejas homosexuales pero pide más

Madrid, 18 dic (EFE).- La Federación Estatal de Lesbianas, Gais, Trans, Bisexuales, Intersexuales y más (FELGTBI+) celebra que el Vaticano haya aceptado la "posibilidad de bendecir" a parejas del mismo sexo, aunque le apena que no se equiparen al matrimonio y aboga por trabajar más para que tengan esa consideración.

"Es un pequeño paso, pero parece que poco a poco estamos en un camino de inclusión dentro de la Iglesia católica", ha subrayado en declaraciones a EFE el coordinador del grupo de Fe y Espiritualidad de la FELGTBI+, Óscar Escolano, que se ha mostrado satisfecho con que se haya seguido el ejemplo de los obispos católicos alemanes, que fueron los primeros en adoptar esta decisión.

No obstante, el portavoz de la federación ha lamentado que las parejas homosexuales no se equiparen al matrimonio "y que ni siquiera sea un rito, sino algo que se ofrece a discreción del sacerdote", por lo que cree que "todavía hay que trabajar más" para visibilizar que la realidad LGTBI "es una más dentro de la variedad y diversidad que existe dentro de la Iglesia católica".

"Hacer visible que esta realidad existe, que también nosotros somos capaces de amar, que Dios nos quiere igual que a cualquier otro ser humano, que somos parte de la diversidad de la obra de Dios y que nuestro amor es tan real y verdadero como el de un hombre y una mujer", ha añadido.

En la práctica, la decisión del Vaticano supone que los sacerdotes podrán bendecir uniones de homosexuales "que no tendrán que ocultarse" como hasta ahora hacían muchas parejas, explica Escolano, que recuerda que muchas se han casado por el rito católico -aunque sin validez para la Iglesia- "a puerta cerrada para evitar un escándalo o que un sacerdote puediera ser amonestado".

"Ahora se podrá hacer libremente sin necesidad de ocultarlo, a la vista de todo el mundo; es verdad que no se considera un rito, sino una bendición, pero esto supone que de una manera u otra ya no se condena ni es algo tan mal visto que se tenga que hacer en secreto, sino que una pareja puede recibir esa bendición aunque todavía no sea un sacramento", ha remarcado.

Para Escolano también implica un avance hacia la visibilidad y puede resultar "muy pedagógico" para aquellas personas que todavía son reticentes a la realidad LGTBI o para adolescentes que no saben si salir del armario o no por miedo a lo que puedan pensar sus padres. EFE

rbf/jls