Cuidar las mitocondrias para evitar ansiedad, depresión o esquizofrenia

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Madrid, 21 oct (EFE).- La neurocientífica Carmen Sandi asegura que cuidar las mitocondrias de las células cerebrales con alimentación, ejercicio físico y suplementos dietéticos, puede ayudar a combatir la ansiedad, la depresión o la esquizofrenia.

"Cuando existen estos problemas de salud mental se ven alteraciones de las mitocondrias", explica la científica en una entrevista con EFE en la que subraya que ahora "hay un boom" por entender por qué "esos pequeños orgánulos del interior de las células creadoras de energía empeoran en situaciones de estrés".

Sandi, directora del Laboratorio de Genética del Comportamiento en el Brain Mind Institute of Technology de Lausanne (Suiza) ha viajado esta sema semana a Madrid participar en la VII Conferencia Cajal "mitocondria y comportamiento. La luz que enciende las perezosas células cerebrales", celebrada en la Academia de Medicina.

 A pesar de que las mitocondrias son las centrales energéticas de nuestras células y el cerebro es uno de los órganos que más energía requiere para funcionar, su papel en el cerebro apenas se está comenzando a investigar, explica.

Metabolismo y mitocondrias

La neurocientífica avanza que "son increíbles los resultados sobre el metabolismo y las mitocondrias", ya que "mediante la nutrición hemos sido capaces de reducir los síntomas e ansiedad y depresión en roedores, así como avanzar en la comprensión de los procesos moleculares, estructurales y funcionales afectados por la enfermedad en células cerebrales específicas”.

En este sentido, se refiere a los beneficios comprobados con el consumo de grasas -triglicéridos- de cadena media que se metabolizan rápidamente en cuerpos cetónicos, aunque lamenta que estas grasas se encuentren "en muy pocos alimentos, como el aceite de coco".

"Hicimos un estudio hace unos cuantos años en el que dimos a animales altamente ansiosos estos triglicéridos de cadena media y al pasar 10 días ya no lo eran", comenta, mientras destaca que también se observaron cambios en su metabolismo cerebral.

Ensalza también los beneficios de administrar como suplemento alimenticio el mononucleótido de nicotinamida (NMN), un derivado de la vitamina B3, una molécula esencial en los procesos de producción de energía celular y otras reacciones metabólicas del cuerpo.

“Los alimentos que lo contienen son el brócoli, las coles de Bruselas, los tomates, los pepinos, la carne, el pescado o el hígado", revela Carmen Sandi, a pesar de que destaca que las cantidades aportadas por estos alimentos son muy bajas y "con problemas más agudos hay que recurrir a pastillas con mayor concentración".

Detalla la científica que hay dos tipos de ansiedad desarrollados a través de la evolución para defendernos, al activar respuestas conductuales y fisiológicas muy importantes y efectivas cuando hay peligros, pero que en la vida real "muchas veces nos perjudican bastante"

Distingue entre la ansiedad de estado, relativa a momentos de preocupación aguda o ante situaciones temporales, que sufren personas que no son normalmente ansiosas como rasgos de personalidad, y la ansiedad como rasgo.

"Las personas que son ansiosas como rasgo de personalidad la tienen mucho más a menudo. No necesitan muchas disculpas para preocuparse demasiado por las cosas o para tener respuestas fisiológicas muy exacerbadas. Es algo que estamos muy interesados en entender porque convierte a estas personas en muy vulnerables a muchas enfermedades, sobre todo mentales", advierte. EFE

oli /mcm

(foto)

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