Madrid, 14 sep (EFE).- La miopía en edades tempranas ha aumentado un 17,8 % en los últimos seis años, lo que supone que uno de cada cinco niños en edad escolar padece este problema visual, según el Barómetro de la Miopía en España 20230, elaborado por el grupo de investigación de la Universidad Complutense y la Fundación Alain Afflelou.
El barómetro, presentado este jueves, llama la atención sobre la necesidad de prevenir este defecto visual en la etapa escolar donde una buena visión es esencial en el aprendizaje y cualquier problema en la salud visual de los alumnos puede llegar a causar, incluso, fracaso escolar.
Según estimaciones de la Asociación Nacional de Empresarios de Ópticas y Profesionales (ANEOP), el 50% de los escolares necesita gafas, pero sus padres no lo saben.
Entre las señales que pueden ayudar a identificar un problema de visión en la etapa escolar son ver que el niño se acerca o aleja demasiado al leer, inclinar la cabeza, confundir las letras, saltarse palabras, bajar la velocidad de lectura o tener problemas de dificultad lectora.
Según la óptico-optometrista e investigadora de la Complutense, Ana Isabel González, la alta prevalencia de la miopía en edades tempranas es una tendencia al alza en la población de todo el mundo.
Esta investigadora ha constatado que este incremento de la miopía infantil en los últimos seis años corresponde, sobre todo, con el tiempo que los niños pasan haciendo determinadas tareas que implican una visión de cerca, como leer o estudiar, pero también con el uso abusivo de dispositivos electrónicos, sin guardar distancia y con iluminación insuficiente.
Además, todo esto hace que los niños pasen menos tiempo al aire libre haciendo uso de la visión lejana, añade el barómetro.
Y dado que el 80% del aprendizaje se obtiene a través de la visión resulta fundamental prevenir problemas visuales en la población infantil y prestar atención a las señales que puedan indicar un defecto visual.
El estudio recuerda que si los problemas de visión no se tratan pueden afectar tanto a la educación como a la comprensión lectora, pero también pueden aparecer problemas derivados, como el estrabismo o el ojo vago.
Por ello recomienda realizar un examen visual al inicio de la edad escolar, así como revisiones periódicas, ya que el diagnóstico temprano es esencial.
Otras acciones que pueden prevenir la evolución de la miopía es que los niños realicen actividades al aire libre durante al menos dos horas al día para descansar su vista y evitar que en casa realicen actividades de visión próxima durante tiempo prolongado, como usar pantallas.
Los datos han sido obtenidos en las revisiones que se realizan a los niños en las campañas que cada año hace la Fundación Alain Afflelou a través de sus centros ópticos.
En la edición del año pasado, la Fundación tuvo más de 11.000 peticiones de citas para revisiones de la vista en niños en edad escolar y entregó más de 5.300 gafas graduadas.EFE
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