Madrid, 3 ago (EFE).- Investigadores de la Universidad Complutense de Madrid (UCM) han confirmado que el Sars-CoV-2 se contagia de humanos a mascotas, pero no al contrario, con lo que han descartado que los animales hayan podido contribuir en algo a la diseminación de la covid-19.
De esta forma, los científicos del proyecto Anticipa-UCM han terminado de aclarar algunas de las dudas que más preocuparon en el estallido de la pandemia en la primavera de 2020 sobre el posible origen animal del virus y el potencial papel epidémico que los animales (especialmente las mascotas) pudieran tener en la transmisión y mantenimiento del coronavirus.
Así, la investigación, liderada por Lucía de Juan Ferré, del Grupo de Investigación Vigilancia Sanitaria, del Centro Visavet de la UCM, ha demostrado, a partir del estudio demás de 2.500 animales y más de 5.000 muestras de mascotas que habían convivido con personas sanas e infectadas, que las mascotas se infectan a partir de personas enfermas, tanto por vía respiratoria como digestiva.
Una vez infectados, los animales eliminan bajas cargas virales, sin que haya llegado a observarse transmisión entre ellas ni riesgo para las personas; ya se hayan contagiado de forma experimental o natural, desarrollan un cuadro clínico leve, con afectaciones respiratorias muy similares a las de los humanos.
En la publicación del proyecto Anticipa-UCM también se recoge el resultado de la gestión del programa COVID-LOT, creado en diciembre de 2020 para mantener una prospección preventiva de infectividad por el virus SARS-CoV-2 en la comunidad universitaria.
Hasta el pasado julio, la iniciativa ha gestionado la extracción, procesamiento y análisis, en condiciones adecuadas de bioseguridad y confidencialidad, de alrededor de 200.000 muestras de saliva de universitarios, que han permitido detectar 2.000 positivos, una gran parte de ellos asintomáticos.
Un análisis en marcha de la genómica de las muestras positivas detectadas por este programa en los dos últimos años permitirá además elaborar el mapa de las variantes de covid-19 a lo largo de las diferentes olas. EFE
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