Las vacaciones de Pedro Sánchez en Marruecos, de carácter privado y pagadas de su bolsillo, no solo han despertado críticas en el PP, que este miércoles calificó de “provocación” o muestra de “soberbia” el viaje del presidente del Gobierno con su familia tras la exigente campaña y las elecciones generales celebradas el 23 de julio. Ahora es el Frente Polisario, a través de su delegado en España, Abdulah Arabi, el que ha protestado por el destino elegido por Sánchez para su descanso.
Para Arabi, el presidente ha dado un paso más tras el histórico volantazo sucedido en su mandato y demuestra “el indiscutible apoyo” de España “a un decadente régimen que vulnera de forma sistemática, diaria e impune los Derechos Humanos del pueblo del Sáhara Occidental”. A su juicio, “si bien rápidamente” se ha querido subrayar desde Moncloa el carácter no oficial del viaje, “dicha elección conlleva aparejado un enorme contenido político que va mucho más allá del ámbito privado”.
La prensa marroquí está dando buena cuenta de la presencia de Sánchez en su país, hecho que no pasa inadvertido para Arabi, que lamenta un uso interesado de las imágenes o el relato para dar alas a “ilegítima reivindicación mantenida por Marruecos respecto del Sáhara Occidental”. El portavoz del Frente Polisario pone de relieve que en este año y medio desde el “unilateral giro” del Gobierno, “la sociedad española ha mostrado su rechazo”.
Se trata de un viaje controvertido con el que Sánchez desmentiría problema alguno con Rabat. En campaña, Alberto Núñez Feijóo mintió acerca de una supuesta falta de colaboración de Sánchez para esclarecer el espionaje de ‘Pegasus’, basándose en un “teletipo” que nunca apareció. Incluso, el candidato del PP deslizó que Marruecos podría tener información sensible -de nuevo sin pruebas- sobre el presidente que -subió la apuesta- habría guiado su política exterior.
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Ni Lanzarote ni Falcon
Controvertido también porque si Sánchez logra continuar en Moncloa lo hará de la mano de Sumar, el partido de Yolanda Díaz, en coalición. Para Díaz, Mohamed VI, el rey de Marruecos, “es un dictador”. La vicepresidenta segunda en funciones incluyó en sus listas, de número tres por Madrid, a Tesh Sidi, que será la primera diputada saharaui en el Congreso: “Mohamed VI es un dictador chantajista sometiendo a un Estado de derecho. La relación con España es tóxica, se negocia con una pistola encima de la mesa y con las personas”, afirmó Sidi en una entrevista concedida a Infobae España.
La eurodiputada de Podemos y cabeza de lista de Sumar en Navarra, Idoia Villanueva, también se ha pronunciado sobre las vacaciones del presidente: “Pedro Sánchez sigue mostrando su complacencia con Marruecos, día tras día, y mientras, Marruecos sigue vulnerando los derechos fundamentales con total impunidad. Una vez más, todo nuestro apoyo al pueblo saharaui y al Frente Polisario en su lucha por la libre determinación y ante el uso ilegítimo de los recursos saharauis”, ha tuiteado.
Medios de comunicación españoles publicaron hace días que Sánchez se encontraba en la residencia oficial de La Mareta, en Lanzarote, noticia que resultó ser falsa. Añadían esas ‘informaciones’ que había volado en el Falcon. Fue el martes cuando el presidente comenzó sus vacaciones y a la espera de que el rey se pronuncie sobre cuál ha de ser el candidato al que encomiende la formación de un gobierno.
Ningún presidente de España había disfrutado de vacaciones en el país vecino desde José Luis Rodríguez Zapatero, que en 2011 pasó la Nochevieja en Tánger. Felipe González también eligió este destino en alguna ocasión.
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