Un pueblo prohíbe circular en bicicleta los domingos por la mañana: “Los ciclistas también tenemos derechos”

El alcalde justificó la decisión argumentando que producen congestión durante las horas en las que se celebran las misas dominicales y el mercado local

Guardar
Imagen de archivo de un
Imagen de archivo de un ciclista. (Mariano Vimos/Colprensa)

División entre los habitantes de un pueblo de Francia por la decisión del ayuntamiento de prohibir el uso de la bicicleta entre las 8:00 y las 12:00 cada domingo. El consejo municipal adoptó esta medida tras recibir numerosas quejas sobre el ruido y la congestión que provocaban los ciclistas durante las horas en que se celebran las misas dominicales y el mercado local.

El alcalde justificó la decisión afirmando que esta medida es esencial para que estas tradiciones perduren “sin ser perturbadas por un flujo de ciclistas”. Pero la reacción de los vecinos ha sido diversa. Algunos han manifestado su descontento, entre ellos, uno de los entrevistados por el medio francés Dbl-constructions, René, quien ha explicado que la bicicleta constituye su principal medio de transporte y que la prohibición limita su libertad de movimiento y su participación en la vida del pueblo.

Antes de la restricción, explica que él utilizaba su bicicleta para tareas cotidianas como comprar pan, visitar amigos e incluso asistir a la misa. “Los ciclistas también tienen derechos, no hay que olvidarlo”, recordó otro residente, al tiempo que otro entrevistado consideraba que era un poco exagerado “prohibir la bicicleta solo para no molestar las misas y mercados.

Por otro lado, algunos vecinos consideran que la presencia masiva de ciclistas dificultaba el acceso al mercado y perturbaba el ambiente de recogimiento en las misas. “Es una buena cosa para la tranquilidad del mercado”, opinó un residente. El efecto sobre los pequeños comercios también ha sido motivo de preocupación. Algunos habitantes han señalado que los ciclistas representan una parte importante de la clientela de los mercados dominicales, y que restringir su acceso podría afectar la economía local.

También apuntan que es una medida que no se puede entender desde el punto de vista medioambiental, ya que la bicicleta es el medio sostenible por excelencia. “¿Prohibir la bicicleta, de verdad? ¿Y la contaminación, la discutimos?”, criticó en unas declaraciones a este medio un habitante.

Podría flexibilizarse en un futuro si resulta demasiado estricta

El consejo municipal ha reiterado que la medida busca proteger la convivencia y el respeto a las tradiciones, pero ha dejado abierta la puerta a futuras modificaciones si la experiencia demuestra que la restricción resulta demasiado estricta o perjudicial para ciertos sectores.

Los gobiernos de coalición formados por PP y Vox después de las elecciones del pasado 28 de mayo, han aprobado varias medidas polémicas en los municipios donde gobiernan

En el periodo de aplicación de la medida, el consistorio ha implementado acciones complementarias como el aumento de la señalización y la presencia de patrullas durante las horas restringidas. Será el turno de los habitantes, quienes deberán dialogar para buscar un necesario equilibrio entre ciclistas, feligreses y comerciantes. Se estudia, por ejemplo, la introducción de horarios o rutas alternativas para los ciclistas.