Marius Borg cambia radicalmente de look para pasar desapercibido por Dinamarca: las imágenes de su cambio

La casa real noruega vuelve a estar en el centro de la atención mediática un día más. Tras los recientes comunicados sobre la salud de la princesa Mette-Marit, su primogénito, Marius Borg Høiby, vuelve a generar titulares debido a su comportamiento y a las acusaciones que pesan sobre él. A pesar de estar bajo la sombra de serias denuncias, el joven ha optado por continuar con su vida con aparente normalidad, alejándose del foco mediático noruego.

Según ha publicado la revista Se og Hør, Marius fue visto recientemente en las calles de Copenhague, Dinamarca, en compañía de un amigo cuya identidad no ha sido revelada. Llamó especialmente la atención su nuevo aspecto físico, que parece una estrategia para evitar ser reconocido. Su habitual melena rubia ha dado paso al cabello castaño con raya al medio, lo que podría estar motivado con su deseo de reducir la atención que recibe por parte de la prensa.

Vestido con ropa informal y ocultando parte de su rostro con unas gafas de sol, Marius logró pasar desapercibido entre los transeúntes. Sin embargo, no pudo evitar ser captado por las cámaras del medio escandinavo, que incluyó su imagen en la portada de la semana.

Según la misma fuente, Borg Høiby se hospedó en el exclusivo hotel Guldsmeden, donde las tarifas oscilan entre los 300 y 800 euros por noche. Este lujoso establecimiento se encuentra ubicado cerca de la discoteca de moda Søpavillonen, aunque no hay pruebas de que el joven haya asistido a este local en particular. Sin embargo, se sabe que tiene prohibida la entrada en el club nocturno Michaels, uno de los lugares más exclusivos de Oslo, frecuentado por la alta sociedad noruega.

Los problemas de Marius Borg con la justicia y su comportamiento errático han causado un enorme impacto en la imagen de la familia real noruega. Durante años, su afición por las fiestas, el alcohol y las sustancias ilegales lo han puesto en situaciones comprometidas. En el pasado, se vio envuelto en diferentes altercados y estuvo temporalmente encarcelado por su presunta implicación en varias agresiones.

Uno de los episodios más comentados ocurrió en 2023, la misma noche en que la princesa Mette-Marit y el príncipe Haakon celebraban su 50º cumpleaños en el palacio real. En lugar de unirse a la reunión familiar, Marius optó por asistir a una fiesta con temática de James Bond en la que vistió un esmoquin negro con pajarita y portó una pistola de juguete en la cintura. Las imágenes de aquel evento no tardaron en viralizarse, causando una gran controversia.

Sin embargo, su vida ha dado un giro de 180 grados tras conocerse las numerosas acusaciones que acumula por violencia de género y agresión sexual desde el pasado mes de agosto. Tras su detención por un episodio protagonizado con su exnovia en su apartamento en Oslo, donde ella acabó siendo hospitalizada, comenzaron a sumarse diferentes denuncias.

En uno de los casos, una mujer de aproximadamente 20 años afirmó haber sido víctima de abuso en el Domingo de Ramos del año pasado. En otro incidente ocurrido en septiembre en el Palacio Real de Skaugum, la presunta víctima declaró que no se sintió sometida a una agresión, lo que ha generado controversia sobre la validez de las pruebas presentadas.

No obstante, a las acusaciones de violación se suman otras denuncias de abuso en relaciones cercanas, con varias exparejas involucradas. Entre ellas se encuentran Juliane Snekkestad y Nora Haukland, quienes han asegurado haber sido víctimas de malos tratos a lo largo de su noviazgo. Además, Høiby enfrenta una acusación por amenazas de muerte contra un hombre cercano a su grupo de amigos.