Andrew Tate vuelve a ser noticia: una serie de Netflix lo menciona justo antes de su declaración por un supuesto tráfico de personas

Andrew Tate es una figura conocida y muy controversial desde hace años. Tras retirarse del kickboxing en 2016, acudió a la edición británica de Gran Hermano, donde acabó expulsado por agredir a una mujer. Desde entonces, se formó un personaje en redes realizando vídeos donde lanza mensajes considerados de ideas misóginas.

Este tipo de contenido le ha permitido ganar millones de seguidores, convirtiéndose en un referente de la idea del hombre exitoso y dominante, frente a la mujer sumisa. Con este contexto, la nueva serie de Netflix que está arrasando, Adolescence, se ha atrevido a mencionarlo en uno de sus capítulos.

Estas miniserie trata la masculinidad tóxica en el ambiente juvenil, impulsada en redes sociales. Se sumerge en el lado más oscuro de internet, donde se fomentan los crímenes y delitos más graves. Uno de los aspectos que señalan en la serie como focos de esta tendencia son los líderes sociales que defienden estas ideas, y aquí es donde aparece Andrew Tate.

La mención de Tate en esta serie ha llegado en el instante menos favorable para este creador de contenido. Las acusaciones de difundir mensajes de odio o de defender la actitud machista vienen de más atrás, pero ahora se enfrenta a una situación muy grave a nivel legal.

Andrew Tate ha sido acusado de tráfico de personas en Rumanía. Junto a su hermano, Tristan, viajó en un avión privado el pasado viernes al país de Europa del este para hacer frente a la acusación. Los hombres inocentes no huyen. Limpian su nombre en los tribunales“, afirmó Tate.

En 2022, los dos hermanos fueron detenidos por cargos relacionados con trata de personas, abuso de menores y lavado de dinero. Desde el principio han defendido su inocencia, pero la justicia rumana mantiene la investigación abierta.

Hace un mes, se les levantó la prohibición de viajar, pues hasta ese momento debían presentarse regularmente registro ante la policía. Aprovecharon para marcharse a Florida, pero ahora deciden volver para “limpiar su nombre”, vinculado a un grupo criminal.

Los hermanos Tate tienen doble nacionalidad británica y estadounidense. Cuando fueron “encerrados” en Rumanía, Estado Unidos presionó para que se les devolviera el pasaporte y pudieran bajar. Esto permitió que acabaran volviendo a Florida.

Sin embargo, lo que no esperaban es que al llegar a suelo norteamericano, el fiscal general de Florida, James Uthmeier, anunciara el 4 de marzo que habían abierto una investigación criminal contra ellos, acumulándose los trámites y problemas legales.

El exluchador explotó en redes sociales, afirmando que “no tenemos antecedentes penales y esperábamos una bienvenida de héroes después de haber sido injustamente maltratados en el extranjero”. Aseguraron estar profundamente decepcionados por el trato recibido al volver a su país.

Por otro lado, en Reino Unido tienen una orden de arresto. Tras conocerse la acusación por el supuesto tráfico de personas en Rumanía, los británicos anunciaron otras acusaciones por delitos diferentes, relacionados con agresión sexual entre 2012 y 2015. Por ello, cuando concluyan sus procedimientos legales en Rumanía, serán extraditados a la isla británica.