La noche más desenfrenada de ‘First Dates’: la “pistola del amor”, un matrimonio encubierto y un flechazo con “un millón de seguidores”

Dos parejas han salido unidas, mientras que una ha terminado en reproches

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La noche más desenfrenada de
La noche más desenfrenada de 'First Dates' (Montaje Infobae)

La noche del 3 de marzo ha estado verdaderamente reñida para escoger la mejor cita de First Dates. Y es que, en el último programa han destacado tres parejas icónicas, pero que han experimentado experiencias diferentes. Por un lado, la conversación entre Ascensión y Vicente ha podido recordar a cualquier matrimonio longevo, pues la pareja ha discutido en diferentes puntos de la velada. Los dos se acusaban de no ser escuchado por el otro. No obstante, ella ha hecho una lista de todos los pretendientes en sus 35 años de soltera de los que se arrepiente de no haber elegido porque “ya no queda ninguno”.

Sin embargo, la cita entre Itziar y Javier no ha sido para menos. Los jóvenes “influencers” han tenido una gran “conexión” desde el primer cruce de palabras entre ambos. Durante su cena, han hablado abiertamente de sus gustos más ardientes, aunque en un momento de la cena ella casi se va de la mesa al conocer una de las aficiones de él. Mientras, Lola Pistola e Isern han sabido conocerse en profundidad y pasar una noche muy agradable. Ella es sexóloga y ha quedado fascinada con las propuestas que le han hecho a él. En cuanto a Isern, ha comentado que mantenía una relación abierta con su pareja y le ha fascinado su cita, a quien ve como “un alma libre”.

Un matrimonio encubierto, pero fallido

La noche más desenfrenada de
La noche más desenfrenada de 'First Dates' (First Dates)

Ascensión, una mujer que se define como “una señora de los pies a la cabeza”, llegó al programa con la esperanza de encontrar a un caballero que la respetara y la hiciera feliz. Tras 35 años de soltería, se lamenta de no haber elegido a ciertos pretendientes, ya que “ya no queda ninguno”. Su cita, Vicente, un hombre extrovertido y activo, la recibió con una rosa y una sonrisa.

Sin embargo, desde el primer momento, Ascensión dejó claro que “en el físico no han acertado”. Aun así, decidió conocerlo mejor y comenzó a relatar su vida, desde su infancia en el coro de la iglesia hasta su matrimonio fallido y su relación con un “torero” que “se fijó en mí”. Vicente intentó compartir su historia, pero la conversación se convirtió en un monólogo interrumpido por continuas disputas sobre quién tenía el turno de palabra.

La tensión alcanzó su punto álgido cuando Vicente comenzaba a sentirse desplazado de la conversación, por lo que optó por mostrar su energía con un espontáneo baile de salsa cubana. Al final de la cita, Ascensión aceptó una segunda oportunidad, pero Vicente, sincero, le dijo que “como pareja, no quería repetir”. El motivo fue que ella no le preguntó nada sobre su vida y que además, “no me has dejado hablar”. No obstante, ella se ha indignado, pues opina que ha sido Vicente quien no le ha dejado hablar: “Me has cortado tres veces”.

Un flechazo de millones de seguidores

La noche más desenfrenada de
La noche más desenfrenada de 'First Dates' (First Dates)

La segunda pareja de la noche estuvo formada por dos influencers, Itziar, conocida en redes como Egea, y Javier, un tatuador con 40.000 seguidores. Desde el primer instante, la química fue evidente. “Con que tengas 18, me la pela”, comentó Javier sobre la edad de su cita, generando risas.

El momento cumbre llegó cuando Itziar reveló que contaba con “un millón de seguidores en TikTok”. Javier, sorprendido, exclamó: “Yo no soy nadie”. La complicidad entre ambos aumentó al hablar de tatuajes, atracción física y gustos en la intimidad. “Me imagino lo imposible”, confesó ella, insinuando la química palpable entre ambos. Y es que el tatuador y la joven han coincidido en su pasión por el sexo “en cualquier parte”, ha confesado ella.

Sin embargo, la armonía se vio amenazada cuando descubrieron que pertenecían a equipos de fútbol rivales. “Eres del Barça, me piro”, dijo Itziar en tono de broma y decepción. Pero la atracción pudo más, y en el reservado, tras un beso apasionado, la joven le hizo una propuesta: “Te vendrás conmigo a un hotel ahora, ¿no?”. Entre risas y provocaciones, la pareja dejó claro que su historia no terminaba en el restaurante: “A ver si vamos a terminar follando en el taxi de la emoción”.

La pistola que hace triunfar al “amor”

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La noche más desenfrenada de 'First Dates' (First Dates)

La tercera cita de la noche fue protagonizada por Lola Pistola, una educadora sexual que llegó con una pistola rosa de plástico para disparar “amor” a su cita, Isern. Desde el inicio, ambos congeniaron al compartir su visión sobre la diversidad sexual y las relaciones abiertas. Isern explicó que llevaba “ocho años en una relación abierta” y que buscaba nuevas experiencias.

Lola, fascinada, sintió que era “la última pieza del puzle que estaba buscando”. La velada estuvo marcada por conversaciones desenfadadas, anécdotas sobre performances postporno y un análisis humorístico sobre tabúes escatológicos. “Los catalanes somos mucho de hablar de mierda y pedos sin tapujos”, comentó ella, provocando carcajadas en su acompañante.

La complicidad entre ambos fue creciendo y, en el reservado, sellaron su conexión con “besos húmedos poco normativos”. Asimismo, “las fiestas de techno es dónde más buen rollo he encontrado yo con la gente”, ha confesado él antes de comenzar a bailar en una de las salas privadas con su cita. Más tarde, ha confesado que se dejó llevar por el encanto de Lola y que “todo lo que me guardo se me sube a la cabeza y me salen ideas de mierda”.