El emocionante rescate de Chincho: la policía de Valencia consigue salvar a un perro que llevaba tres días encerrado en un coche robado sin comida ni agua

Los agentes de la Comisaría de Proximidad Ciutat Vella de la Policía Local de Valencia han rescatado a un perro llamado Chincho, un perro que llevaba desaparecido desde el pasado domingo 5 de enero. El perro, que estaba en el coche de su dueño, ha estado encerrado en el vehículo durante casi tres días.

Los dueños perdieron la pista de su mascota después de que, en la capital valenciana, su coche les fuera robado en plena madrugada. Instantáneamente, denunciaron ante las autoridades el robo del vehículo, con el aviso importante de que el perro se encontraba en su interior.

Los hechos han ocurrido el miércoles 8 de enero, hacia las 16:00 horas, cuando las autoridades valencianas localizaron a un vehículo estacionado en la calle Marqués de dos Aguas, en cuyo interior había un perro, según ha informado la Policía Local.

A través de la emisora, los agentes comprobaron la matrícula del vehículo y corroboraron que se trataba del coche denunciado el pasado fin de semana. Al confirmar que el animal llevaba, aproximadamente, 60 horas encerrado (desde la madrugada del domingo), sin comer ni beber, llamaron a los bomberos, que rápidamente acudieron al lugar.

Los bomberos utilizaron un gancho para abrir el vehículo y rescatar a Chicho. El perro, de la raza sitzu, presentaba síntomas de deshidratación, por lo que, acto seguido de sacarle del vehículo, los agentes le aprovisionaron de agua. A continuación, la Policía Local avisó a los propietarios, que se presentaron en el lugar y se hicieron cargo del vehículo, después de protagonizar un emotivo reencuentro.

Gracias a la rápida actuación policial, “Chicho está con sus dueños en perfectas condiciones”, anunciaba la policía en su vídeo, el que se puede ver a la dueña visiblemente emocionada por el volver a tener en brazos a su mascota.

Es una historia muy similar a la vivida estas mismas Navidades en Caen (norte de Francia). Lo que se avecinaba como unas felices fiestas casi acaban en tragedia por la pérdida de la mascota. Mismo patrón: lugar céntrico, coche aparcado y el perro dentro.

Pero en este caso, no se trató de un robo, sino de un olvido. Es la historia de Turbo, un perro que estuvo dos días encerrado en el coche de su dueño a causa de un descuido. Por desgracia, el propietario del vehículo, y del perro, padecía Alzheimer y era incapaz de recordar dónde había dejado su coche.

La desesperación fue máxima. El dueño hizo un llamamiento en redes sociales para ver si los vecinos del barrio podían ayudarle. La repercusión fue tal que la policía se asombró al ver a tanta gente mirar los interiores de los vehículos aparcados. Al cabo de dos días, los agentes localizaron un coche con un perro dentro y avisaron al dueño, que les permitió romper la ventana para rescatar a Turbo.

Los vecinos trajeron agua y comida para asegurar el bienestar del canino antes de su traslado a comisaría, donde se reencontraría con su amo. Así, Turbo pudo pasar las Navidades con su familia.