Mantener la casa limpia es el objetivo de muchos. Sin embargo, hay estancias que se complican más que otras. Así, la cocina es quizá una de las partes más complejas debido a sus múltiples electrodomésticos. En este contexto, hay para quienes la vitrocerámica es uno de sus enemigos principales.
Lograr que la vitrocerámica quede impecable puede ser un desafío, especialmente cuando se acumulan manchas difíciles o restos de comida quemada. Además, si no se limpia de forma adecuada, se pueden generar rayones en la placa. Por este motivo, son muchos los que recurren a la opinión de los expertos antes de limpiar sus casas.
Yoli, conocida en TikTok como @yolandavaquitayoli, es una creadora de contenido especializada en consejos de limpieza y cuidado del hogar. Con más de 1.4 millones de seguidores, la granadina comparte regularmente trucos prácticos para la limpieza doméstica. Así, entre sus videos más populares está el cómo limpiar correctamente la vitrocerámica.
Cómo limpiar la vitrocerámica
A la hora de enfrentarse a una vitrocerámica sucia, lo primero que hay que hacer es raspar toda la superficie para eliminar posibles restos de alimentos. Para ello, es importante contar una rasqueta de buena calidad, ya que de lo contrario se corre el riesgo de dañar la placa.
Una vez se haya raspado toda la suciedad, es momento de coger una bayeta y eliminar toda la basura que haya podido quedar. Una vez la vitrocerámica haya quedado limpia, se deberá aplicar un producto de placa por toda su superficie. Cuando se vaya a expandir, se empleará un estropajo de tres capas y se utilizará la parte de la base.
Para limpiar bien la vitrocerámica se harán movimientos circulares por toda la placa para expandir bien el producto y se dejará reposar durante unos minutos. Pasado un tiempo, la experta recomienda ayudarse de un jabonoso y volver a limpiar la placa haciendo movimientos circulares, aunque esta vez es importante que se haga “muy despacio y con los dedos totalmente abiertos para no rayarlo”. Por último, se volverá a coger una bayeta para retirar el jabón.
El último paso es curar la placa con un chorro de vinagre de limpieza. Para ello, y al igual que en el paso anterior, se debe echar el producto y después dejarlo reposar. Más tarde, solo quedará secarlo con papel de cocina.
Por qué es importante mantener limpia la vitrocerámica
Mantener limpia la vitrocerámica es fundamental para garantizar su buen funcionamiento y prolongar su vida útil. La acumulación de grasa y restos de alimentos no solo afecta la estética de la placa, sino que también puede dificultar su funcionamiento al bloquear la transmisión del calor. Además, una limpieza regular previene la formación de manchas difíciles y protege la superficie contra posibles rayaduras.
Por otra parte, y desde el punto de vista higiénico, una vitrocerámica limpia evita la proliferación de bacterias y malos olores, asegurando un entorno más seguro para la preparación de alimentos. Por ello, es esencial limpiarla tras cada uso, utilizando siempre productos específicos. Del mismo modo, evitar productos abrasivos como estropajos metálicos o limpiadores con partículas duras prolongará la vida útil de la placa.