Una profesora de Primaria opina sobre la cantidad de regalos que los niños reciben el Día de Reyes Magos: “Pueden sobreestimular al niño”

En un reciente video de TikTok, la profesora conocida como @cori_entrepetits, docente de Primaria, compartió su reflexión sobre la cantidad y tipo de regalos que los niños deberían recibir durante las celebraciones de Navidad y Reyes Magos. Su planteamiento gira en torno a una regla simple pero efectiva: la “norma de los cuatro regalos”. Según la profesora, esta fórmula puede ayudar a evitar el exceso de estímulos y fomentar una relación más significativa entre los niños y sus obsequios. La propuesta de Cori parte de una división concreta de los regalos, basada en cuatro categorías:

• Algo que necesite: Este regalo tiene un propósito práctico y responde a una necesidad concreta del niño, como una mochila nueva para el colegio, un escritorio para estudiar o unas zapatillas deportivas.
• Algo para llevar: Aquí se incluyen objetos personales, como una prenda de ropa especial, un chándal para actividades deportivas o incluso unas gafas de sol.
• Algo que quiera: Este es el espacio para el deseo más inmediato del niño, como un juguete, un puzle o algún objeto que haya pedido con ilusión.
• Algo para leer: Libros adaptados a su edad o intereses, que estimulen su creatividad y curiosidad, son la pieza clave para fomentar el hábito de la lectura.

Según Cori, esta estrategia no solo ayuda a reducir el número de regalos, sino que también fomenta un enfoque más equilibrado, considerando tanto las necesidades como los deseos del niño.

La profesora argumenta que recibir demasiados regalos puede generar un efecto contraproducente en los niños. Explica que el exceso de obsequios puede provocar una sobreestimulación que impida al niño disfrutar plenamente de lo que recibe, llevándolo a una necesidad constante de más.

Además, señala que cuando los niños tienen demasiadas opciones, es común que terminen ignorando muchos de los regalos y no desarrollen un vínculo significativo con ellos. En este sentido, destaca la importancia de seleccionar regalos que puedan compartirse, como juegos de mesa o actividades en familia, en lugar de aquellos que aíslen al niño en su uso.

Cori también hace hincapié en el impacto que tienen los regalos en la educación emocional de los niños. Recibir muchos obsequios puede generar una expectativa irreal sobre lo que significa la Navidad o el Día de Reyes, vinculándolos exclusivamente al consumo. Al reducir la cantidad, se puede poner el foco en valores como la gratitud, la generosidad y el compartir momentos en familia.

Asimismo, recalca que enseñar a los niños a valorar lo que tienen es una lección que los acompañará a lo largo de su vida. Por ejemplo, al recibir un libro, no solo obtienen un objeto físico, sino una oportunidad para explorar mundos nuevos, desarrollar su imaginación y aprender.

Otra de las ideas que destaca Cori es la importancia de elegir regalos que fomenten la interacción y el tiempo compartido. “Los mejores regalos son aquellos que el niño pueda compartir”. Juegos de mesa, actividades creativas o experiencias como entradas a un parque o teatro son algunas opciones que pueden fortalecer los lazos familiares o de amistad, al tiempo que pueden permitir crear recuerdos significativos.

Este enfoque busca contrarrestar la tendencia a los regalos individuales que muchas veces promueven el aislamiento, como dispositivos electrónicos o juguetes con un uso limitado a un solo niño.