España permite ya retirar los fondos de pensiones acumulados desde hace más de 10 años: qué podemos aprender del caso de Reino Unido de 2015

La medida, establecida por el gobierno de Mariano Rajoy, permite a los titulares de planes de pensiones retirar el dinero invertido, siempre que haya pasado un tiempo mínimo desde la aportación

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Fondos de pensiones (Frepik)
Fondos de pensiones (Frepik)

A partir de este 1 de enero, los titulares de planes de pensiones destinados a complementar su pensión de jubilación podrán retirar el dinero acumulado proveniente de las aportaciones realizadas hace más de 10 años. Concretamente, podrán acceder de forma anticipada al ahorro y los rendimientos generados hasta el 31 de diciembre de 2015.

En España se pondrán a disposición un total de 64.000 millones de euros para transferir directamente a la cuenta corriente a través del plan de rescate. La modificación, establecida en una ley de 2014 -durante el gobierno de Mariano Rajoy-, introduce una nueva forma de liquidez para los planes de pensiones, permitiendo a los titulares retirar el dinero invertido, siempre y cuando haya transcurrido un determinado período de tiempo desde la aportación. Cada año se irá ampliando este plazo de rescate: en 2025, será posible retirar las aportaciones hasta 2015, mientras que las correspondientes a 2016 podrán ser rescatadas en 2026, y así sucesivamente.

A partir de este enero, se abre la incógnita de cuántos titulares retirarán su plan de pensión y cómo lo harán: ¿retirarán todo el dinero acumulado de golpe? ¿A qué destinarán los aportes una vez que lo rescaten del fondo de pensiones?

Y algunas de las respuestas pueden estar en Reino Unido, ya que España no es el primer país en implementar una medida de este estilo. En abril de 2015, Reino Unido implementó una de las reformas más importantes de su sistema de pensiones en el último siglo, denominada “Libertad y Elección en Pensiones” (“Freedom and Choice in Pensions”). Esta reforma otorgó total libertad a las personas mayores de 55 años para decidir cómo utilizar sus fondos de pensiones bajo esquemas de contribución definida.

Entre las opciones disponibles se incluyó la posibilidad de retirar el total del fondo de pensiones de una sola vez, comprar una renta vitalicia, realizar retiros programados o combinar distintas modalidades. Sin embargo, tras su puesta en marcha, la experiencia británica dejó una serie de lecciones y efectos relevantes en las decisiones de los ahorradores y el funcionamiento del sistema previsional.

Qué ocurrió entonces: preferencia por el consumo inmediato

Las pensiones contributivas subirán un 2,8% en 2025, las mínimas un 6% y no contributivas e IMV, un 9%.

Un aspecto destacado, según los datos recogidos por la Federación Internacional de Administradoras de fondos de Pensiones (FIAP), fue la preferencia de una porción significativa de los británicos por retirar sus fondos. Y es que, durante los primeros nueve meses de implementación, más de la mitad de los individuos que accedieron a su fondo optaron por el retiro total y de una sola vez. Aunque esta cifra disminuyó del 60% al 52% hacia finales de 2015, los datos mostraron que muchas personas preferían disponer de sus ahorros de forma inmediata, a pesar de las implicaciones fiscales: el gobierno británico facilitó que solo el 25% de lo retirado estuviese exento de impuestos, mientras que el resto era gravado en función de los ingresos del solicitante.

No obstante, la mayoría de quienes retiraron sus fondos totales eran personas con pequeñas cuentas de pensiones, de menos de 10.000 libras esterlinas (unos 12.100 euros). Esto mostró que los individuos con fondos mayores tendieron a mantener un enfoque más conservador.

El informe de la FIAP, que analizaba las consecuencias de esta medida tan solo un año después de su implementación, también mostraba la caída sustancial en la venta de rentas vitalicias, un producto financiero que anteriormente era obligatorio para muchas personas en el sistema británico (y que consiste en un contrato con una aseguradora que, a cambio de un pago único o de una serie de pagos, garantiza al titular del contrato una renta fija durante un período determinado).

Desde el anuncio de la reforma en 2014, las ventas de rentas vitalicias disminuyeron drásticamente, alcanzando una reducción del 80% en 2016 respecto a los niveles de 2013. Esta llamada “paradoja de las rentas vitalicias” reflejaba que los individuos no suelen optar por estas por voluntad propia, incluso si representan un seguro de ingreso vitalicio durante la jubilación. Además, la opción de combinar diferentes instrumentos financieros y el surgimiento de nuevos productos previsionales ofrecieron alternativas a las rentas vitalicias, aunque estos suelen ser más complejos y, en algunos casos, costosos.

Los planes de pensiones surgen
Los planes de pensiones surgen para garantizar que los trabajadores disponen de un fondo de ahorros cuando alcanzan la jubilación. (Getty)

En términos de resultados financieros, los datos recopilados en el primer año de la reforma mostraron que los retiros totales en efectivo alcanzaron los 4.300 millones de libras esterlinas (5.200 millones de euros) en Reino Unido. Las ventas de rentas vitalicias y retiros programados generaron 4.200 millones y 6.100 millones de libras, respectivamente (4.914 millones y 7.137 millones de euros). Además, parte del dinero retirado de los fondos se destinó al consumo, a la inversión o al pago de deudas personales, según las encuestas realizadas entonces.

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