El juez Juan Carlos Peinado ha citado para el 22 de enero a representantes de las empresas Indra Sistemas, Google, Fundación Manpower, Arsys Internet y Telefónica, y de la Universidad Complutense de Madrid (UCM) como testigos en la causa en la que investiga a Begoña Gómez, esposa del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para interrogarles sobre sus inversiones en el software del que sospecha que se habría apropiado la investigada.
Estas nuevas citaciones llegan después de que el pasado 18 de diciembre declarara Gómez ante el juez por esta rama de la investigación en la que se indaga si pudo cometer los delitos de apropiación indebida o si hubo intrusismo por su parte. Fuentes jurídicas presentes en esa declaración, explicaron a Europa Press que descartó a preguntas de su abogado que se apropiase de las marcas al inscribir TSC Transformación Social Competitiva y, posteriormente, el software de la cátedra que había sido financiado por empresas, negando de igual forma que tuviese ánimo de lucro.
Fue en octubre cuando el juez amplió la investigación contra Gómez para indagar en la querella que presentó Hazte Oír por presunta apropiación indebida del ‘software’ de la UCM y por supuesto intrusismo en la elaboración de pliegos de prescripciones técnicas para la contratación del servicio de asistencia y asesoría técnica para crear dicho ‘software’.
Después de que se acordara su citación, su abogado defendió por escrito que si Gómez firmó el pliego de prescripciones técnicas fue “porque la UCM así se lo indicó expresamente”.
La defensa también aportó correos que, a su juicio, prueban que dos miembros de la Oficina de Transparencia de Resultados de Investigación (OTRI) de la Complutense le señalaron “cómo debía registrar” el dominio de internet por el que ahora se le investiga. Sobre este extremo, incidió en que el registro de dicho dominio “fue realizado siguiendo las instrucciones de la propia UCM”.
“Jamás pretendía cobrar por el uso de la plataforma”
La pasada semana, en su primera declaración ante el juez Peinado, Gómez descargaba responsabilidades en la UCM por el software del máster y la Cátedra Extraordinaria de Transformación Social Competitiva que ella codirigía y ha asegurado que no hubo “ánimo de lucro” porque “jamás pretendía cobrar por el uso de la plataforma”, ha remarcado, según fuentes jurídicas presentes en la declaración.
La investigada negaba también la que universidad hubiera creado una cátedra extraordinaria por ser “la mujer del presidente”. A su juicio, fue por su “experiencia” en el sector de la “sostenibilidad”, ya que la UCM, con la que trabajaba desde 2012, tenía “el propósito de profesionalizar” ese ámbito cuando la incorporó a su oferta educativa.
La investigada también ha descargado en la Complutense, concretamente en las “pautas e indicaciones” de su Escuela de Gobierno y Vicerrectorado, la responsabilidad de su firma de los pliegos para la contratación de servicios de asistencia de una plataforma basada en dicho software. Según consta en un correo electrónico aportado a la causa por su defensa, la OTRI de la Complutense le pidió que así lo hiciera.
*Información elaborada por Europa Press.