El exministro de Transportes José Luis Ábalos ha comparecido este jueves en el Congreso de los Diputados para anunciar su denuncia contra la Guardia Civil ante la Fiscalía General del Estado por haber interceptado “correspondencia privada” mientras era aforado. A preguntas de los periodistas, se ha ofrecido a poner a disposición del juez del Tribunal Supremo su información patrimonial para que se investigue y ha asegurado que “no se va a demostrar nada” con ella.
El magistrado Leopoldo Puente ha enviado al Congreso de los Diputados el suplicatorio que haría perder al diputado el Grupo Mixto su inmunidad parlamentaria y permitiría investigar su patrimonio. El instructor de la trama Koldo en el Supremo aprecia “indicios bastantes” de la participación de Ábalos en hasta cuatro delitos: pertenencia a organización criminal, cohecho, tráfico de influencias y malversación.
Sin embargo, el investigado ha defendido en el Congreso su “tranquilidad” basada en que no obtuvo “ningún enriquecimiento” de la trama de presuntas comisiones y “todo el mundo sabe” cómo vive porque ha sido vigilado por los investigadores. “¿Usted cree que alguien que tiene algo que esconder se somete a una sobreexposición y se mantiene en la polémica política?”, ha dicho a una periodista.
Ábalos ha reiterado que “no se amañó absolutamente nada” en relación a las adjudicaciones sospechosas por el supuesto cobro de comisiones que tenían como intermediario entre varias constructoras y el Ministerio de Transportes al empresario Víctor de Aldama. El exministro ha dicho que “la justicia se encargará de ello”.
La denuncia contra la Guardia Civil
Según la denuncia presentada por Ábalos este jueves ante la Fiscalía General del Estado, a la que ha tenido acceso Infobae España, los hechos son de “suma gravedad” porque vulneran su derecho fundamental al secreto de las comunicaciones mientras era aforado.
La denuncia se refiere a un seguimiento que realizaron agentes de la UCO al hermano de Koldo García, Joseba, cuando entregó “un sobre” en la vivienda de José Luis Ábalos. El exministro denuncia que los investigadores tomaron “fotografías” tanto de él y como de su vehículo a las puertas de su casa “al objeto de averiguar en las bases de datos tanto de la Guardia Civil como de la Dirección General de Tráfico la titularidad del vehículo” que figuraba a su nombre. En la rueda de prensa ofrecida en el Congreso, Ábalos ha dicho que el contenido del citado sobre fue “decepcionante” para los agentes, ya que era de dominio público.
“La unidad de seguimiento se quedó en la puerta de mi casa, haciendo vigilancia y esperando a que saliera, fotografiarme y sacar fotos de mi vehículo”, ha apuntado el exministro, que ha subrayado que “en definitiva, están violentando a un representante electo”. Y ha añadido: “Me niego a que esto sea normal porque, si somos capaces de abstraernos de los personajes y de la valoración que podamos merecer, hay un hecho muy grave: una investigación al margen de una autorización judicial”.
También ha tenido tiempo el exministro de cargar contra Víctor de Aldama cuestionando su estrategia de defensa que le valió para salir de la cárcel: “Hace una declaración con tal de obtener la libertad en el mismo día, sin ninguna prueba, que tarde 15 días en presentar”.