Así es la vida de Eva González tras separarse de Cayetano Rivera: centrada en su familia y construyendo la casa de sus sueños

La presentadora de televisión andaluza ha comprado a su expareja su parte de los terrenos en los que iban a construir su hogar familiar antes del divorcio, para empezar un nuevo proyecto

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La presentadora Eva González, en una fotografía de archivo (EUROPA PRESS)
La presentadora Eva González, en una fotografía de archivo (EUROPA PRESS)

La presentadora de televisión Eva González ha tomado una decisión que supone un cambio en su vida. La que fue mujer del torero Cayetano Rivera desde 2015 hasta finales de 2022, ya solo mantiene en común una sola cosa con el diestro, su hijo de seis años. Ahora, la andaluza ha comprado a su exmarido el 50% de la finca en la que un día planearon construir su hogar familiar y que, hasta ahora, era la única propiedad que ambos compartían.

Tras cumplirse ya varios años desde su separación, Eva quiere iniciar un nuevo proyecto y construir la casa de sus sueños en la finca de 1.075 m² que se encuentra en Mairena de Alcor, Sevilla, el pueblo natal de la modelo. La hipoteca de la finca se firmó en mayo de 2022, tan solo unos meses después de que la pareja hiciese público su divorcio.

En esa misma localidad, donde ahora la sevillana quiere iniciar una nueva etapa, fue donde Cayetano, Eva y su pequeño, pasaron los meses de cuarentena por el Covid-19 juntos. Eva sigue con el mismo sueño de construir ahí una casa para vivir junto a lo que más quiere en la vida, su hijo. Además, podrá tener cerca al resto de sus familiares, entre ellos su madre, Encarna, con la que mantiene muy buena relación y a la que siempre se ha apoyado en momentos difíciles: “De mi madre heredé la flamencura y el coraje de vivir”, decía sobre ella.

Sus propiedades

González siempre ha mostrado el amor que tiene hacia su tierra natal; sin embargo, muchas veces por cuestiones de trabajo le es muy complicado instalarse de manera definitiva en Sevilla, pues sus principales proyectos laborales se encuentran en Madrid. Además de la separación de Cayetano, González ha experimentado cambios en los últimos años, y este 2024, ha viajado, de manera habitual, de Mairena de Alcor a la capital.

Eva González junto a su hijo, en el cumpleaños de la modelo (Instagram/ @evagonzalezoficial)
Eva González junto a su hijo, en el cumpleaños de la modelo (Instagram/ @evagonzalezoficial)

Moverse de un sitio a otro no es algo costoso para la modelo en lo que respecta al alojamiento, puesto que cuenta con un gran patrimonio y varias propiedades repartidas por varias zonas de España, entre ellas Madrid. Cuando está en la capital, Eva se instala en un ático de 61 m² situado en la zona centro de la ciudad, que cuenta con dos habitaciones y que adquirió en 2004, tras convertirse en Miss España. Si esta desease venderlo podría hacerlo por un valor de casi medio millón de euros, una cantidad no apta para todos los bolsillos.

Aunque de momento parece que vender ese piso no entra en los planes de la presentadora, sí que ha vendido otra de sus propiedades, aunque esta estaba situada en Conil de la Frontera (Cádiz). Además de la finca que ha comprado a Cayetano, posee tres terrenos más en Alcalá de Guadaíra, en Sevilla. Estas son tres propiedades de las que ella es dueña de un 50% y que comparte con su hermana María. Se trata de dos fincas rústicas –una de 45 hectáreas y otra de 5.700 m²– y una finca de secano de 60 hectáreas.

Centrada en sus proyectos

Ahora, la joven está centrada en sus proyectos profesionales. Estas últimas semanas está al frente del concurso de canto de La Voz, programa en el que es la presentadora. Y este año también se ha dejado ver en López y Leal contra el canal, una de las novedosas apuestas de Antena 3 este 2024.

Ahora que se acercan fechas especiales, Eva quiere estar enfocada en su familia, planear su nueva casa y disfrutar junto al amor de su vida, su hijo. La modelo no ha vuelto a tener una relación estable pública desde que se separó de su exmarido. Como siempre, se ha mantenido en una actitud discreta en lo que respecta a su vida más personal.

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