La historia del villancico de Rodolfo el reno: un mito navideño creado en una época terrible

Dentro de poco es Navidad y los villancicos son el cántico clásico de esta época del año. Entre ‘Feliz Navidad’ o `Mi burrito Sabanero´, resuena otra canción muy popular entre los niños, que esperan con ilusión la noche del 24 de diciembre, la noche en que viene Papá Noel con su trineo, tirado por nueve renos.

El villancico `Rodolfo el Reno´ es un emblema de estas fechas, pero ¿de dónde surge la idea? Resulta curioso saber que el villancico tuvo su inspiración a través de un cuento escrito por un judío, Robert May en 1939, que se dedicaba a hacer las descripciones de los productos para el catálogo de la tienda.

El cantante Venezolano César Muñoz ha sido quien ha contado la historia de este popular villancico. En esas fechas, la tienda vendía principalmente libros para colorear, pero aquel año se propuso hacer algo distinto, por lo que pidieron a Robert May que escribiera un cuento navideño; sin embargo, el escritor no pasaba por un buen momento personal. Su esposa acababa de fallecer.

De todos modos, se decidió por contar una historia de un reno, por ser un típico animal de la Navidad y empezó a investigar y a hacer los primeros bocetos. Para asegurarse de que la historia funcionaba, leía el cuento a su hija Bárbara, que tenía 4 años, según ha contado El Heraldo de México.

Para agosto de 1939 había acabado el cuento y a las primeras personas que se lo leyó fueron a Bárbara y a sus suegros. Al ver sus caras, estaba convencido de que el objetivo del cuento se había conseguido. “El cuento fue un éxito entre los clientes de la tienda, en diciembre se regalaron 2,4 millones de copias del libro”, ha explicado César Muñoz.

“No se imprimieron más porque empezó la Segunda Guerra Mundial y había restricciones sobe el uso del papel. Para 1946, cuando la guerra terminó, se imprimieron otras 3,6 millones de copias”, ha resaltado el cantante.

Fue ese mismo año cuando la compañía discográfica RCA Víctor le ofreció hacer a Robert May un audiolibro. El único inconveniente era que el escritor no poseía los derechos del cuento, pero tras una breve negociación con la tienda, los obtuvo. Posteriormente, se comercializó el libro, tanto en formato audio como impreso. Este último se vendió por 50 centavos de dólar.

Los primeros en musicalizar el tema fueron Robert y Jhonny Marks, ambos judíos, y el primero en grabar la canción fue Gene Autry, en junio de 1949. Se estima que se vendieron 12,5 millones de copias de su canción.

Érase una vez un reno llamado Rodolfo que, por haber nacido con una peculiar nariz roja, grande y brillante, caminaba solo por la nieve. Los demás renos se burlaban de él: “Preces un payaso o tienes una manzana en la nariz”, le decían. Rodolfo sentía mucha vergüenza y cada día se alejaba más de la gente. Su familia sentía mucha pena por él.

Pero la Navidad llegó, y Papá Noel estaba preparando su trineo para entregar los regalos a todos los niños del mundo. Sin embargo, apareció una intensa niebla que no permitía a Santa Claus ver nada. De repente, vio una luz roja y brillante, y empezó a seguirla. ¡Era Rodolfo el reno!

Entusiasmado, Papá Noel pidió a Rodolfo que tirara también de su trineo. Rodolfo no podía creérselo y aceptó enseguida. Gracias a que su nariz, que iluminaba el camino y guiaba a Santa Claus, todos los niños pudieron tener sus regalos a tiempo.

Rodolfo se convirtió en el reno más querido y admirado por todos. ¡Fue un héroe!