Una veintena de agentes de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil pistola en mano, con ariete y escudos: así fue la entrada en el domicilio de Koldo García, exasesor del exministro José Luis Ábalos, donde se encontraba con su esposa y la hija de ambos, una menor que en ese momento tenía solo 3 años.
El vídeo de esa entrada, al que ha tenido acceso Europa Press, muestra como los agentes irrumpen a las 08.02 horas de la mañana del 20 de febrero de 2024 en la casa por la puerta principal y al grito de “al suelo, Guardia Civil”. En esos primeros instantes se encuentran frente a frente con la pareja del investigado, quien rápidamente levanta los brazos, se tumba en el suelo y avisa a los agentes de que hay una menor de edad en el domicilio.
A los pocos minutos, y una vez que acceden el resto de agentes de la UCO pertrechados con escudos, armas, chalecos y cascos, sientan en la sala principal a Koldo García -al que esposan- y al resto de la familia. Arranca un registro que se extenderá, según fuentes jurídicas consultadas, por 12 horas.
Entrada “salvaje”
El propio Koldo García, consultado por esta agencia de noticias, aún recuerda con estupor esa entrada de los agentes que califica de “salvaje”, máxime cuando, añade, él mismo ofreció las llaves de su domicilio a los investigadores una vez se percató de que se había abierto una investigación sobre su persona.
“Después de haber dedicado mi vida a ayudar en todo lo que podía en cualquier punto de España y fuera de España, y tras colaborar en todo -con la Guardia Civil- durante 35 años, entráis con un ariete, con escudos y con pistolas en la mano cuando hay una menor de 3 años dentro del domicilio”, recuerda.
Preguntas sobre Aldama y sobre Ábalos
Durante ese registro, según fuentes del entorno del exasesor consultadas por Europa Press, los agentes intentaron obtener información por parte de Koldo García sobre Víctor de Aldama, el presunto conseguidor de la trama, y del exministro Ábalos.
Además, señalan estas fuentes, el exasesor colaboró con la UCO señalando dónde estaba la caja fuerte, dónde tenía guardados los siete rifles que posee para cazar, y aportó las claves de sus dispositivos.
Ese registro se trasladó posteriormente a una casa de aperos ubicada en una huerta que posee el exasesor y al domicilio de su madre. Pero antes, y durante el registro de su domicilio, las cámaras de seguridad instaladas pudieron grabar no sólo las imágenes de los agentes registrando el lugar sino también sus conversaciones.
De hecho, estas fuentes consultadas explican que existen por lo menos dos grabaciones más del interior del domicilio en el que se registraron esas conversaciones “comprometidas” -según apuntan- de los propios agentes.
El vídeo de esta entrada, que el propio Koldo García califica de “desproporcionada”, sale a la luz un día antes de que se produzca la declaración en calidad de investigado del exasesor ante el juez del ‘caso Koldo’ en el Tribunal Supremo. Y el mismo día en el que se ha producido la declaración de De Aldama.
Cabe recordar que en esta causa se investigan presuntas mordidas por la adjudicación de contratos públicos para la adquisición de mascarillas durante la pandemia, en 2020.
Koldo García, en una reciente entrevista concedida a Europa Press, negó tajantemente haber recibido comisiones ilegales por esos contratos por parte de De Aldama, mientras que el presunto conseguidor se ha mantenido firme en sus acusaciones contra el exasesor y contra el exministro tanto en su declaración en la Audiencia Nacional como en la del Supremo.
* Información elaborada por Europa Press