Los ladrones no descansan ni en las fechas festivas. Ahora que los comerciantes y ciudadanos pasan más tiempos en sus casas con sus seres queridos, los encapuchados corren a los distintos comercios y negocios para intentar saquear los bienes que encuentren.
Esto es lo que le ha sucedido a Mickaël Vaslin, un vecino de Ombrée, entre las ciudades de Rennes y Angers, al oeste de Francia. Un artesano que se encontraba descansando en su casa cuando recibió una alerta en su teléfono móvil de las cámaras de seguridad de su carpintería.
Los hechos ocurrieron alrededor de las 22:30 horas del pasado domingo 8 de diciembre. Cuatro hombres sin el rostro visible estaban forzando las puertas para acceder al negocio y poder robar los enseres de su interior, según ha informado el diario francés Ouest France.
Afortunadamente, la alarma saltó. En el momento en el que el carpintero recibió la alarma, alertó a su mujer y le pidió que llamara a la policía. Mientras tanto, el hombre se conectó a las cámaras de su negocio a través del ordenador. El sistema de videovigilancia está equipado con un altavoz.
Mickaël Vaslin aprovechó para advertirles: “¡Espérame! ¡Ya voy!”, antes de salir a toda prisa junto a su hijo. “Cuando se trata de las posesiones, uno no piensa. Vamos a por ello”, ha explicado el carpintero. En total tardaron 10 minutos en presentarse en el lugar.
Cuando llegaron, los asaltantes ya se habían ido. Aproximadamente 10 minutos más tarde llegó la policía y comprobó que la puerta lateral del local había sido forzada. Desafortunadamente, este era el único punto ciego de las cámaras de vigilancia.
Los ladrones consiguieron entrar forzando la puerta. La policía se dio cuenta de que uno de los dispositivos de vigilancia estaba girado. El artesano comprobó el inventario y notó que los encapuchados robaron aparatos costosos como una motosierra, un destornillador o una sierra de mesa.
Advierte a sus vecinos y compañeros
Según el primer informe, se robaron alrededor de 6.000 euros. En dieciséis años de trabajo independiente, este comerciante nunca había sufrido un robo. El carpintero presentó una denuncia y compartió imágenes de las cámaras de seguridad en las redes sociales. “Para advertir a nuestros amigos artesanos y comerciantes que es útil”, ha razonado Mickaël Vaslin.
En cuanto a las investigaciones policiales, “no podemos más que animar a los comerciantes a equiparse con video protección”, han asegurado el jefe de escuadrón, Grégoire Chalmeau, que está al mando de la investigación. El robo de las herramientas es común. “Es un producto caro de comprar y se vende bien”, ha añadido.
Actualmente, se están realizando investigaciones para identificar a los asaltantes. “Tenemos algunos elementos. Estamos trabajando en ello, pero es una guerra de tiempo”, ha explicado el agente. “Hace unas semanas, la policía detuvo a algunas personas por actos similares”, ha especificado.
Mickaël Vaslin había decidido equipar su taller con este sistema de vigilancia hace tres años. Y “aunque los hemos perdido por poco”, las cámaras de seguridad al menos han permitido que los daños materiales fueran menores, ha concluido.