Cada vez es más frecuente ver a famosos elegir destinos privados para pasar sus vacaciones para esquivar los focos. Pese a que en la era digital es casi imposible escapar de las miradas de los curiosos, los personajes públicos conocen todos los trucos para disfrutar de unos días de descanso lejos de la vorágine del día a día.
Los Duques de Sussex, es decir, el príncipe Harry y Meghan Markle, suelen mostrarse muy celosos de su intimidad, al igual que la mayoría de miembros de la realeza. Por ello decidieron pasar sus vacaciones en una isla privada que, aunque no es de su propiedad, se puede alquilar o comprar.
La fracción de tierra se localiza en uno de los espacios naturales preferidos de los famosos. Kaibu Island se sitúa en el archipiélago de Lau, en Fiji, ubicado en el Pacífico Sur. Tras el paso del matrimonio, este destino se ha puesto a la venta por un precio inalcanzable para la gran mayoría de bolsillos.
Según se ha podido conocer, el precio ascendería hasta los 78 millones de dólares, aproximadamente. Este paraíso tropical, que ofrece lujo, privacidad y una serie de instalaciones de primer nivel, ha capturado la atención de quienes buscan una escapada inigualable.
La historia de Kaibu Island con los Sussex se remonta a 2018, cuando la pareja real incluyó la isla en su primera gira oficial tras su boda. El viaje, que abarcó Australia, Fiji, Tonga y Nueva Zelanda, fue una mezcla de compromisos reales y momentos de descanso. La estancia en el exclusivo resort Vatuvara Private Island fue uno de los momentos más destacados. Según se informó, Harry y Meghan pasaron una noche en la isla disfrutando de su aislamiento y lujo.
¿Qué ofrece Kaibu Island?
La isla es un verdadero oasis para quienes buscan exclusividad y confort. Kaibu Island abarca más de 3.200 metros cuadrados y cuenta con tres villas privadas, un campo de golf y una pista de aterrizaje. Además, el lugar dispone de un avión Twin Otter y, por 1,5 millones de dólares más, se incluye un submarino de dos plazas de la marca U-Boat Worx, que permiten a sus propietarios explorar y disfrutar de la zona de manera única. Las instalaciones de la isla están impulsadas por energía solar, y dispone de una planta de desalinización que garantiza un suministro constante de agua fresca.
La empresa Vladi Private Islands, encargada de la venta, describe Kaibu Island como el “paquete definitivo” y destaca que es posiblemente la propiedad de isla privada más completa disponible en la actualidad. Farhad Vladi, director ejecutivo de la compañía, señala que esta oferta marca un nuevo estándar de aventura y exclusividad en el mercado de islas privadas.
La venta de Kaibu Island representa una oportunidad para alguien que desee adquirir un pedazo de paraíso con conexiones reales. La isla, con su entorno idílico y sus lujosas comodidades, sigue siendo un destino de ensueño que promete una experiencia inigualable. Con un precio de 79,5 millones de dólares, la isla se presenta como una inversión exclusiva para los más afortunados.
Para Harry y Meghan, la isla de Kaibu es un recuerdo de los inicios de su vida como pareja real, un símbolo de la privacidad y la tranquilidad que buscaron durante sus primeros años juntos. Para el comprador, es la posibilidad de vivir como la realeza, rodeado de naturaleza, lujo y un sinfín de experiencias inolvidables.