El patrimonio de Aznar: su chalet en Marbella, la casa familiar en Pozuelo y los números rojos de su sociedad

José María Aznar fue presidente del Gobierno de 1996 a 2004 y desde entonces su actividad no se ha detenido, ni la política ya desde el ámbito privado y como ideólogo y analista, aún con influencia en el PP, ni la empresarial. Su función más visible, su cargo distintivo es la presidencia de la Fundación FAES, que asumió nada más abandonar el Palacio de la Moncloa. Su objetivo, el de la organización, es “nutrir el pensamiento del centro liberal reformista con propuestas que influyan en la toma de decisiones y repercuten en la opinión pública”. El patrimonio de Aznar proviene de muy diversas fuentes.

Fuera del foco de FAES, se mueve entre empresas e instituciones. Según su propio currículum, disponible en su página web, es también presidente del Instituto Atlántico de Gobierno, consejero en Afiniti (multinacional estadounidense de datos y software) y News Corporation (gigante de la comunicación y el entretenimiento), miembro del consejo consultivo internacional de Barrick Gold Corporation (empresa minera de oro más valiosa del mundo), asesor especial del despacho de abogados Latham & Watkins LLP y presidente europeo de la Iniciativa para Latinoamérica del Consejo Atlántico de Estados Unidos, entre otros cargos destacados.

Además, fundó junto a Ana Botella la empresa Famaztella, un acrónimo que representa ‘familia de Aznar y Botella’. Esta sociedad gestiona los derechos de propiedad intelectual de los libros publicados por ambos. En 2023, Famaztella reportó pérdidas de 27.085 euros, una caída significativa en comparación con los beneficios de 184.619 euros del año anterior. La compañía cerró el ejercicio con un patrimonio neto de 2,97 millones de euros, una ligera reducción respecto a los 3 millones registrados en 2022.

El interés por los negocios no se limita al matrimonio. José María Aznar Jr., el hijo mayor, es presidente no ejecutivo de Liceo Capital Advisors, gerente de Maserati Msg Racer y dirige varias empresas bajo el nombre de Poniente, entre ellas Poniente Energy, Poniente Ventures y Poniente Capital. Por su parte, el hijo menor, Alonso Aznar, tiene experiencia en empresas como Poniente Capital, GreyHounders y The Consello Group, además de participar en el sector inmobiliario. Ana Aznar, la única hija, se ha dedicado a la psicología y la docencia, trabajando como profesora en la Kingston University.

La residencia principal de José María Aznar y Ana Botella es el chalet familiar en Pozuelo de Alarcón, en Madrid, una vivienda unifamiliar de tres plantas y 617 metros cuadrados construidos sobre una parcela de 1.500 metros cuadrados. Comprada durante su etapa en la presidencia, esta casa sigue siendo el eje central del matrimonio en la capital.

Su refugio en verano es su propiedad en Marbella, en la urbanización de Guadalmina Baja. Allí, la pareja disfruta de una parcela de 2.141 metros cuadrados con una vivienda reformada que incluye cuatro dormitorios, un despacho y áreas para el servicio. Este inmueble, valorado catastralmente en casi 850.000 euros, es también el punto de reunión de la familia y un lugar predilecto para practicar golf y pádel.

Según El Confidencial, la familia también posee una destacada propiedad en Richmond upon Thames, al sur de Londres. Esta residencia se adquirió tras años de vida en Reino Unido, donde Ana Aznar y su marido, Alejandro Agag, establecieron su hogar durante más de quince años. En sus inicios, habitaron un piso en Chelsea, con tres plantas y jardín trasero. Además, cuentan con una casa en el exclusivo barrio de El Viso, en Madrid, que fue comprada en 2008 por más de 2,5 millones de euros, seguida de una reforma valorada en otro millón. También poseen una villa de veraneo en Sotogrande, Cádiz.

La pareja formada por Ana y Alejandro no es la única de la familia con propiedades relevantes. Su hermano José María adquirió en 2005 una casa en la Isla de Valdecañas, en Extremadura, una vivienda de 270 metros cuadrados con cinco habitaciones, cuatro baños y un porche con vistas al pantano. Este inmueble estuvo envuelto en polémica judicial cuando ecologistas denunciaron la urbanización, aunque un juez decidió salvar las casas ya construidas. Además, José María también cuenta con un chalet en El Viso, cerca del Paseo de la Castellana, adquirido por 1,8 millones de euros. Las reformas en esta vivienda, de más de 300 metros cuadrados y dos plantas, se extendieron durante más de un año, destacó Vanitatis.