Cuáles son los estados de la nacionalidad española​ y qué significa cada uno

La nacionalidad española es un vínculo jurídico que conecta a una persona con el Estado español, otorgándole derechos y obligaciones. Sin embargo, dentro de este marco existen diferentes “estados” de la nacionalidad que determinan la relación específica entre la persona y España. A continuación se explicará qué implica cada uno de los estados.

Un español de origen es aquel que adquiere la nacionalidad al nacer. Esta también puede obtenerse por ser hijo de padre o madre española, independientemente del lugar de nacimiento. Además, en caso de hijos de extranjeros nacidos en España que no puedan transmitir su nacionalidad al hijo, este adquiere la nacionalidad española para evitar la apatridia. Ser español de origen significa que la nacionalidad nunca puede perderse, ni siquiera de forma voluntaria.

Este estado corresponde a las personas que obtienen la nacionalidad española a través de un proceso formal posterior al nacimiento. Las formas más comunes son por residencia, por opción y por carta de naturaleza. Este estado implica que la nacionalidad puede perderse si se cumplen ciertos requisitos, como vivir de manera continua fuera de España y adquirir otra nacionalidad voluntariamente.

España permite la doble nacionalidad con países que tienen acuerdos específicos. En estos casos, las personas no tienen que renunciar a su nacionalidad original al obtener la española.

Para los ciudadanos de otros países, el acceso a la doble nacionalidad no es automático y requiere cumplir con procesos legales específicos.

Se trata de un estado infrecuente que puede darse cuando la nacionalidad española se suspende temporalmente debido a circunstancias legales, como casos de fraude en su obtención. En estos casos, los derechos asociados a la nacionalidad quedan limitados hasta que se resuelva el conflicto.

Las personas que perdieron la nacionalidad española pueden recuperarla si cumplen con ciertos requisitos, como residir legalmente en España y declarar su voluntad de recuperar la nacionalidad.

Para quienes no tienen la nacionalidad española por nacimiento, el proceso de solicitud de la misma pasa por diferentes fases, reflejadas en la plataforma web del Ministerio de Justicia. Estas etapas permiten al solicitante conocer el estado de su expediente en cada momento. A continuación se presentará un resumen de las fases de tramitación más habituales:

1. A la espera de ser admitido a trámite: Esta es la primera fase tras la presentación de la solicitud de forma telemática. Indica que el expediente ha sido enviado con éxito, pero está pendiente de ser recibido por el órgano competente.
2. Abierto - Registrado: En solicitudes presenciales realizadas en el registro civil, esta etapa confirma que el expediente ha sido registrado oficialmente y está listo para ser enviado al Ministerio de Justicia.
3. Abierto - En tramitación: En este caso el expediente ya está en manos del Ministerio de Justicia. Aunque no se han iniciado los trámites, se confirma que la solicitud cumple con los requisitos formales.
4. Pendiente de solicitud y respuesta de informes preceptivos: El Ministerio solicita documentos a otras instituciones, como el Instituto Cervantes o el CNI, para verificar la información aportada. Este proceso puede durar varios meses.
5. En estudio y en calificación: En estas etapas, el expediente es evaluado exhaustivamente antes de emitir una resolución, favorable o denegatoria.

La resolución de las solicitudes de nacionalidad española requiere de un tiempo mínimo de un año.