La inspección técnica de vehículos no es una medida exclusiva para coches y camiones. Desde 1989, la maquinaria agrícola, incluyendo tractores, cosechadoras y remolques, está sujeta a la ITV. Esta obligación se implementó para garantizar que estos vehículos, que operan en entornos rurales y a menudo en condiciones exigentes, mantengan un buen nivel de seguridad y eficiencia. La ITV, similar a la que realizan los vehículos convencionales, busca reducir los riesgos en carretera, no solo para los conductores de estos vehículos agrícolas, sino también para los demás usuarios de las vías.
Uno de los objetivos principales de esta normativa es minimizar el impacto ambiental que la maquinaria agrícola pueda tener, al garantizar que los sistemas de emisión y otros elementos críticos estén funcionando adecuadamente. Además, al estar sometidos a revisión periódica, se asegura que las máquinas no representen un peligro por fallos técnicos, especialmente dado que muchas de ellas circulan a baja velocidad y en situaciones que requieren una alta fiabilidad de los componentes mecánicos.
La inspección técnica de maquinaria agrícola cubre varios aspectos esenciales para garantizar su funcionamiento y seguridad. Durante la ITV, los inspectores revisan en detalle tanto los sistemas de funcionamiento como los elementos de seguridad.
- Sistemas de funcionamiento: Se examinan los frenos, la dirección, el alumbrado y los neumáticos, entre otros componentes. La verificación de estos sistemas es crucial, especialmente porque los tractores y remolques suelen operar a bajas velocidades, pero a menudo en condiciones de gran carga o en terrenos irregulares, donde la fiabilidad de estos sistemas es esencial para evitar accidentes.
- Elementos de seguridad: Además de la mecánica, se revisan los sistemas antivuelco, que son fundamentales para la protección del conductor en caso de accidente. Estos sistemas se encuentran anclados al bastidor del tractor y son parte de la jaula de protección que también incluye los arcos de seguridad. Los vehículos con atomizadores, que se utilizan para la aplicación de productos fitosanitarios, también son revisados para asegurarse de que sus sistemas estén en perfecto estado. La seguridad es especialmente crítica en este tipo de maquinaria, ya que los riesgos de vuelco o accidentes en el campo pueden ser elevados, y estos sistemas están diseñados para proteger al conductor en situaciones de riesgo.
La frecuencia con la que los vehículos agrícolas deben pasar la ITV varía en función del tipo de maquinaria y su velocidad máxima. Existen diferencias entre los tractores agrícolas o forestales que circulan a más de 40 km/h y los que no superan esa velocidad, lo que influye directamente en la periodicidad de la inspección.
- Tractores que circulan a más de 40 km/h: Para estos vehículos, la primera inspección no es obligatoria hasta que alcanzan los cuatro años de antigüedad. A partir de este punto, deben pasar la ITV cada dos años hasta cumplir los 16 años de edad. Después de esa fecha, la inspección se realiza anualmente para asegurar que sigan cumpliendo con los estándares de seguridad y funcionamiento.
- Tractores que circulan a menos de 40 km/h: En este caso, la ITV se realiza por primera vez a los ocho años de antigüedad. Al igual que los vehículos más rápidos, los tractores de menos de 40 km/h deben pasar la inspección cada dos años entre los ocho y los 16 años de antigüedad. Una vez superados los 16 años, deberán acudir a la ITV anualmente. Esta distinción en la periodicidad responde a las diferentes exigencias de seguridad según la velocidad a la que circulan estos vehículos, siendo los de mayor velocidad más propensos a estar involucrados en situaciones de mayor riesgo.
86% de aprobados
Las cifras proporcionadas por el Ministerio de Industria y Turismo en 2023 revelan que los vehículos agrícolas gozan de una tasa de aprobación destacada en la ITV, con un 86% de ellos superando la inspección a la primera. Esta cifra es notable, ya que refleja el buen estado general de la maquinaria agrícola en España en comparación con otros tipos de vehículos. A su vez, los datos muestran que la tasa de aprobación se incrementa considerablemente en las segundas inspecciones, alcanzando casi el 98%.
Este alto índice de aprobación subraya el nivel de mantenimiento que los propietarios de maquinaria agrícola tiene sobre sus vehículos, lo que a su vez asegura un bajo impacto en la seguridad vial. Esto se debe a una combinación de factores, entre los que destacan los estrictos controles a los que se someten estos vehículos y la conciencia de los agricultores y propietarios sobre la importancia de mantener sus equipos en condiciones óptimas.