La familia formada por el protagonista de Pretty Woman y Alejandra Silvia ultima sus preparativos en su nuevo hogar en La Moraleja. Junto a sus tres hijos, Richard Gere se instalaba definitivamente en nuestro país hace solo unos días; no obstante, su mansión, en uno de los barrios más exclusivos de Madrid, parece no ser suficiente para la diversión de los pequeños, ya que, como ha revelado Vanitatis en exclusiva, el matrimonio ha decidido edificar una segunda construcción.
Se trata de un proyecto que está todavía entre manos y que podrán disfrutar los más pequeños de la familia, los dos hijos que tienen en común la pareja. Quienes parece ser que ya han comenzado su nueva vida en Madrid y disfrutan de sus primeros días de colegio. Sin embargo, ahora cuando vuelvan a casa podrán divertirse también en su nueva casa en el árbol.
El propio Richard Gere anunció en una de sus últimas entrevistas en Estados Unidos que celebrarían la tradicional fiesta americana de Acción de Gracias en su nuevo hogar de la capital española. Y, ahora, conocemos que después de trasladarse todos a Madrid, también ha querido contentar a sus hijos con su propio espacio, contratando a una empresa especializada en fabricar casas en árboles.
Se trata de la compañía Casitas en Árboles, ubicada en Vizcaya y que se emplea en toda España. Además, en su web se pueden observar algunos de los proyectos que han realizado en toda nuestra geografía, como Chiclana de la Frontera, en Cádiz; Cebreros, en Ávila o, más cerca de la nueva localización del actor, Las Rozas de Madrid.
La nueva mansión del intérprete cuenta con unos 10.000 metros cuadrados y varios árboles; por lo tanto, se trata del lugar ideal para la creación de este tierno espacio. Además, en la web de la empresa afirman que se necesitan uno o varios árboles para la fabricación de las casas, para que se sujeten de forma segura. Igualmente, antes de esta instalación se realiza un estudio previo para su viabilidad. No obstante, no se puede conocer su precio, ya que cada una de ellas es diferente y, en función de la personalización, se encarece el presupuesto.
Un hogar alejado de los medios
El matrimonio escogió La Moraleja por su espectacular vivienda que combina lujo y privacidad, puesto que, según informó Vanitatis, ambos buscaban escapar de la prensa que los perseguía en su rancho en Connecticut. Ahora, su nueva residencia, de 800 metros cuadrados, se ha convertido en una auténtica fortaleza con muros de cuatro metros de altura que rodean un extenso jardín, además de contar con una garita de seguridad y ocho cámaras de vigilancia.
La casa, ubicada en una de las zonas más codiciadas de la urbanización, ha sido reformada para adaptarse a las necesidades de la pareja y sus hijos. Aunque el interior de la vivienda es un secreto bien guardado gracias a contratos de confidencialidad firmados por los trabajadores, se sabe que incluye ocho habitaciones, seis baños, un amplio salón de 50 metros cuadrados, comedor, gimnasio privado, bodega, semisótano y piscina climatizada. También cuenta con un garaje con capacidad para tres vehículos y un jardín de 3.000 metros cuadrados diseñado para el disfrute de los más pequeños.
El valor de esta propiedad supera los cuatro millones de euros, según aseguraban las inmobiliarias de la zona. Este nuevo hogar marca el inicio de una etapa en Madrid para la familia, que deja atrás su rancho de 13.000 metros cuadrados en Estados Unidos.