El coronel jefe de la UCE-2 de la Guardia Civil, la unidad que investiga el terrorismo internacional, se ha amparado en la Ley de Secretos Oficiales para no revelar ante el juez los motivos por los que condecoró al comisionista del caso Koldo Víctor de Aldama en 2022. Sí ha aclarado que lo hizo a instancias del comandante Rubén Villalba, el único agente imputado en la causa, según informan fuentes presentes en la declaración.
El coronel Vázquez Aznárez, que ha comparecido en calidad de testigo junto a tres de sus subordinados en la unidad, ha confirmado que tanto Aldama como Koldo García eran “colaboradores” de la unidad que dirige. Ha explicado que la relación del exasesor de José Luis Ábalos con el instituto armado comenzó en 2009, cuando el mando trabajaba en la lucha contra ETA. La incorporación de Aldama a la lista de confidentes, ha dicho, se produjo en 2019.
Sin embargo, a preguntas de las acusaciones populares, el coronel se ha amparado en el secreto profesional para no desvelar las razones concretas por las que la UCE-2 concedió a Aldama la medalla al mérito de la Guardia Civil.
Sobre las conversaciones con el comandante Villalba que incluyó la UCO en uno de sus informes, el mando ha asegurado que los audios fueron producto de una “teatralización” que prepararon los agentes de la unidad para que, una vez tenían constancia de la investigación, el compañero imputado (Villalba) contara los detalles de las supuestas irregularidades en las que incurrió junto a Koldo y Aldama.
En un extracto de esas conversaciones, el coronel jefe llegó a aleccionar al comandante imputado por haber cortado la relación con ambos colaboradores tras saber de la investigación: “Que no, que no hay nada. O sea, lo que sí es cierto es, lo que sí hicimos mal, y eso te lo recriminaré en su momento, es haber cortado totalmente, de una forma tan drástica”.
Sobre los pagos a Villalba para dotar a Aldama de teléfonos móviles “seguros”, el coronel los ha enmarcado en la “normalidad” de las relaciones que mantienen los agentes de la unidad con sus colaboradores. Sobre esta cuestión, los otros tres agentes, que presuntamente ingresaban dinero en efectivo procedente de Aldama en la cuenta personal de Villalba, se limitaron a cumplir sus “órdenes”.
Debido a que Aldama estaba registrado en el sistema de confidentes de la UCE-2, la unidad recibió un “aviso” cuando el comisionista comenzó a ser investigado por la UCO. El coronel preguntó a los investigadores sobre estas pesquisas y trasladó “tranquilidad” a Villalba, según una de las conversaciones intervenidas. Sin embargo, la unidad no detuvo en ese momento la colaboración con Aldama y Koldo García.
Compra de un dron
En su declaración voluntaria ante el juez, Aldama reveló que compró un dron para la UCE-2 porque la unidad no tenía recursos económicos para afrontar la adquisición de ese material. Sobre esta afirmación, el coronel Vázquez Aznárez ha respondido que la compra de ese dron fue gestionada por el comandante Rubén Villalba, que era quien se encargaba en la unidad de los medios técnicos.