La Unión Europea ha adoptado una nueva normativa que, a partir de 2025, transformará la manera en que se realizan las transferencias bancarias en su territorio. A partir del 9 de enero de 2025, todas las transferencias inmediatas entre cuentas de entidades bancarias en los países miembros de la UE deberán completarse en un plazo máximo de 10 segundos, independientemente del día o la hora en que se realicen. Esta medida promete eliminar los retrasos actuales en las transferencias bancarias ordinarias, que hasta ahora podían tardar hasta 48 horas, o incluso más si se realizaban durante fines de semana o festivos.
Además, la normativa establece que el coste de las transferencias inmediatas deberá ser igual o inferior al de las transferencias ordinarias, lo que implica la eliminación de los sobrecostes que, en muchos casos, los bancos aplicaban a los servicios de transferencias rápidas.
El Boletín Oficial del Estado (BOE) en España ratificó esta normativa en marzo de 2024, lo que significa que los bancos españoles tienen la obligación de adaptarse a estas nuevas condiciones. Aunque la normativa ya está vigente a nivel europeo, las entidades financieras del país tienen un plazo de adaptación hasta el 9 de octubre de 2025 para implementar los cambios necesarios en sus sistemas y ofrecer transferencias inmediatas sin costes adicionales a sus clientes. Mientras tanto, los bancos deberán mantener sus sistemas antiguos operativos hasta que la transición esté completada.
¿Transferencias gratuitas?
Una de las principales características de la nueva normativa es la eliminación de los sobrecostes que solían acompañar a las transferencias inmediatas. Tradicionalmente, las transferencias rápidas eran más caras que las ordinarias, lo que disuadía a muchos usuarios de utilizarlas.
Aunque la normativa no obliga a que todas las transferencias sean gratuitas, sí garantiza que las transferencias inmediatas no cuesten más que las ordinarias. Esto podría beneficiar especialmente a los clientes con cuentas bonificadas, como las asociadas a nóminas o pensiones, quienes podrían disfrutar de transferencias gratuitas, tanto ordinarias como inmediatas. Para los demás clientes, el coste de las transferencias inmediatas será el mismo que el de las tradicionales, eliminando la discriminación de tarifas.
Competencia para Bizum
Con la introducción de esta nueva normativa, llega una nueva competencia frente a sistemas de pago como Bizum, que ha ganado gran popularidad en España. Este sistema, que permite realizar pagos instantáneos entre usuarios mediante el número de teléfono móvil, ha sido una opción muy atractiva para pequeños pagos y transferencias informales. Sin embargo, con la nueva normativa europea, las transferencias inmediatas entre cuentas bancarias tradicionales se convertirán en una alternativa aún más competitiva, pues ofrecerán una velocidad similar sin los costos adicionales que actualmente tienen algunas transferencias inmediatas.
Otra de las áreas donde esta nueva normativa promete un cambio significativo es en las operaciones de las pymes. Estas empresas, que dependen en gran medida de la rapidez en los pagos para mantener la liquidez y operar de manera eficiente, se beneficiarán enormemente de las transferencias inmediatas sin costos adicionales. Anteriormente, las transferencias bancarias convencionales a menudo podían causar retrasos considerables, especialmente si los pagos se realizaban cerca de los fines de semana o días festivos, lo que afectaba a la operatividad de estas compañías.