El Código de Buenas Prácticas que permite cambiar de hipoteca variable a fija o mixta sin pagar comisiones adicionales, finalizará el 31 de diciembre de 2024. Esta medida, implementada por el Gobierno para aliviar los costes de cambio de hipoteca, no se extenderá en 2025.
Durante 2023 y 2024, esta normativa ha permitido a muchos ciudadanos cambiar su hipoteca sin incurrir en costes adicionales, en respuesta a la fuerte subida del euríbor. Este índice alcanzó su pico máximo en octubre de 2023, situándose en un 4,160%, pero ha descendido en el mismo mes de este año al 2,691%. Aunque esta disminución ha aliviado las cuotas mensuales de las hipotecas variables, no ha compensado completamente las subidas de años anteriores.
¿Cuánto costará subrogar una hipoteca en 2025?
A partir de 2025, los costes para subrogar una hipoteca volverán a aplicarse. Los ciudadanos deberán cubrir la tasación de la vivienda, que ronda los 400 euros, y pagar una comisión del 0,05% sobre el capital pendiente. Según el ejemplo del sitio web Seguros TV, para una deuda de 200.000 euros, el cambio de hipoteca podría costar alrededor de 500 euros en total.
Simone Colombelli, director de Hipotecas de iAhorro, ha señalado que, a pesar de este precio, cambiar la hipoteca podría ser beneficioso si el euríbor vuelve a subir a corto o medio plazo: “Pagar 500 euros por cambiar la hipoteca compensará, y mucho, a los hipotecados, sobre todo en caso de que el euríbor vuelva a subir a corto o medio plazo”.
Sobre esto, también se debe tener en cuenta que subrogar una hipoteca, cambiándose de banco para mejorar sus condiciones o pasándola de variable a fija o mixta, es ventajoso cuando las tasas de interés han bajado y las condiciones de las nuevas hipotecas son mejores que las originales. El principal incentivo para subrogar es el ahorro en la cuota mensual que puede suponer para el hipotecado.
¿Y si se cambia mediante la cancelación de la hipoteca?
Por otro lado, cambiar de hipoteca mediante la cancelación y apertura de un nuevo préstamo implicará costes significativamente mayores. Además de la tasación, será necesario cubrir gastos de notaría, gestoría, registro y posiblemente una comisión de apertura si el nuevo banco la aplica. Se estima que podrían ser unos 700 euros de registro, 500 de notaría y otros 300 de gestoría, a lo que habría que añadirle una comisión por amortización total de la hipoteca, que serían entre 500 y 300 euros, dependiendo de cuándo se haga la cancelación. Estos costes, según Colombelli, podrían oscilar entre los 2.200 y 2.400 euros en total, incluyendo comisiones de amortización total del préstamo.
Con el fin de esta medida en diciembre de 2024, quienes consideren cambiar su hipoteca deben evaluar sus opciones y actuar pronto para beneficiarse de esta oportunidad de ahorro. Colombelli duda que el Gobierno extienda esta medida de cero comisiones un año más, ya que el euríbor está en una fase de descenso y la situación actual es mejor que la de años anteriores.