Las denominadas estafas del amor están a la orden del día y cada vez se destapan más casos. A mediados de noviembre, la Policía Nacional detuvo en Lleida una mujer española residente en Andorra que presuntamente pertenecía a un grupo criminal dedicado a estafar con el método del “engaño amoroso”, mediante el cual consiguió más de 20.000 euros.
El método consistía en contactar con las víctimas a través de las redes sociales hasta llegar a tener una relación próxima de amistad con ellas, ha informado la policía en un comunicado este martes. Tras esta fase inicial, que en algunos casos desencadenaba en una relación sentimental, la supuesta estafadora mostraba interés en trasladarse a España para conocerse y convivir, pero unos supuestos problemas económicos o burocráticos le impedían el traslado. En este punto, pedía ciertas cantidades de dinero y como las víctimas ya estaban en una situación de dependencia emocional con la estafadora, pagaban las cantidades exigidas.
Tras conocer los hechos, la Policía Nacional inició una investigación y localizó a dos víctimas, si bien sospechan que pueden haber muchas más que hayan sufrido el engaño por parte del grupo especializado, del cual la detenida era una de las cabecillas, por lo que mantienen abierta la investigación.
Se disparan las ciberestafas
El Informe sobre la Cibercriminalidad en España correspondiente a 2023, publicado por el Ministerio del Interior, revela un importante aumento de los ciberdelitos que confirma una clara tendencia al alza. Se registraron 472.125 hechos conocidos por los cuerpos de seguridad frente a los 374.737 de 2022. Pese a la variedad de tipos de delitos que se materializan en Internet, las estafas y fraudes informáticos acaparan el 90,5% del total, seguidos muy de lejos por las falsificaciones informáticas con un 3,2%.