La bolsa española gana galones: el IBEX 35 sorpasa a sus homólogos europeos hasta cuadruplicar su rentabilidad

El selectivo sube un 16% en el año impulsado por la fortaleza de la economía del país y el buen comportamiento de los bancos

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Instalaciones del Palacio de la Bolsa de Madrid.
Alberto Ortega - Europa Press
Instalaciones del Palacio de la Bolsa de Madrid. Alberto Ortega - Europa Press

La bolsa española corona la recta final del año en verde y los inversores que han apostado por el IBEX 35 se embolsarán una rentabilidad que hasta cuadruplica la que están dando otros selectivos europeos. En 2024, y a cierre de esta noticia, el índice español sube un 16%, frente al DAX alemán que escala un 15%, el FTSE 100 de Londres que avanza un 7% y el EurosToxx 50 que remonta un 6,27%. La brecha a favor del selectivo español se agranda si se compara con el CAC francés, que cae un 4% en el año.

Entre las razones que justifican la remontada de la bolsa española destaca el buen comportamiento de nuestra economía frente a las de otros países vecinos como Francia o Alemania que flirtean con la recesión. Los accionistas que invierten en valores españoles se están beneficiando de la escalada de nuestro producto interior bruto que en el tercer trimestre de este año creció un 0,8% respecto al trimestre anterior y en su variación interanual aumentó un 3,4%. En tanto que el crecimiento del PIB de la zona euro fue del 0,4% respecto al trimestre anterior y del 0,9% interanual.

Bancos a velocidad de crucero

Otro de los catalizadores del rumbo al alza de la bolsa española ha sido la escalada de las cotizadas del sector financiero que, a pesar de la bajada de tipos de interés por parte del Banco Central Europeo (BCE), han obtenido mejores resultados que el mercado en su conjunto. Ha sido el sector más rentable de 2024 en Europa, con unos retornos del 21,7%, lo que beneficia al IBEX que se caracteriza por estar muy sobreponderadao en banca.

“Esto explica el buen comportamiento relativo de la bolsa española frente a sus homólogas europeas”, señala Fernando Luque, senior financial editor de Morningstar. En la misma línea se pronuncia Antonio Catelo, analista de iBroker, para quien la remontada del IBEX se debe “básicamente a la buena evolución que han tenido este año valores que tienen mucho peso en el selectivo, especialmente los bancos e Inditex”.

Evolución del IBEX 35 en 2024
Evolución del IBEX 35 en 2024

A la cabeza del selectivo

Banco Sabadell es el segundo valor que más remonta en el IBEX 35 este año, sube un 62%, solo le adelanta IAG que se revaloriza un 68%. Al banco catalán le sigue CaixaBank, que crece desde enero un 39%, algo más que Unicaja, que ocupa el cuarto lugar con una escalada del 38%, le sigue Inditex, con un 34%, y cierra el sexteto ganador Bankinter que sube un 31% en el año. Otras compañías con bastante peso en la ponderación del IBEX, como Mapfre, AENA o Telefónica, también han tenido un importante rendimiento, lo que beneficia a los inversores que apuestan por la bolsa española.

También el analista de mercados Javier Cabrera achaca el despegue del selectivo español a su componente financiero: “El sector bancario representa un 30% del IBEX 35 y, por tanto, lo que haga en bolsa tiene una gran influencia en los índices nacionales”.

Destaca también el comportamiento de Iberdrola e Inditex, que, a su juicio, “son los dos valores más grandes del índice y cuyas dinámicas específicas han sido muy positivas. Sobre todo en el caso de Inditex, que está consiguiendo aumentar sus ventas con un crecimiento de doble dígito a lo largo de este año, “sorprendiendo positivamente al mercado”. Cabrera reconoce que esta evolución contrasta con otros sectores a nivel europeo que han tenido un mal comportamiento. Entre ellos el del lujo.

La “generosidad” de las cotizadas en el Ibex 35 llena los bolsillos de los pequeños accionistas que invierten por dividendo.

Empinamiento de la curva de tipos

Fernando Luque considera que al mercado español “le está beneficiando mucho” las bajadas de tipos de interés del Banco Central Europeo debido a que es muy sensible al movimiento de los tipos por su fuerte peso en el sector bancario y en el de utilities, entre los dos suman más de la mitad del índice.

“Lo que estamos viendo en la evolución de los tipos de interés en la zona euro desde principio de año es lo que se conoce como un empinamiento de la curva de tipos de interés”, apunta Luque. Esto quiere decir que los tipos de interés a corto plazo están cayendo, mientras que los tipos a largo están subiendo. Esta situación beneficia especialmente a los bancos, ya que “pueden prestar a tipos más altos y remunerar los depósitos a tipos más bajos”, explica.

Menos optimismo para 2025

Los analistas prevén que el IBEX 35 no vivirá en 2025 un año tan positivo como el actual. Principalmente por las bajadas de tasas que el BCE se puede ver obligado a aplicar para paliar el impacto económico de los aranceles de Trump, si es que los implanta.

Sin embargo, “en el medio plazo sí que vemos motivos por los que ser optimistas, ya que dudamos que los tipos de interés se ubiquen por debajo del 2%, lo que seguirá permitiendo a la banca tener algo de margen de interés”, argumenta Cabrera. Por otro lado, las bajadas de tipos también pueden estimular la demanda del sector turístico y del sector de la construcción, lo que “también tiene un impacto positivo en las empresas españolas”, agrega. Cree que en el corto plazo “hay bastante incertidumbre y podríamos ver correcciones, pero en el medio plazo deberíamos ver un buen comportamiento”.

Sobre la evolución del selectivo español, Capelo cree que es muy posible que en las próximas semanas se extienda la idea de que el BCE se va a ver obligado a bajar tipos de interés para intentar reactivar la economía europea, especialmente de Alemania y Francia, y afrontar la aplicación de aranceles de EEUU y China, algo que “machacaría a los grandes sectores exportadores europeos y que no ayudaría a mejorar la ya deprimida situación actual”.

Ante este escenario, hace hincapié en que mayores bajadas de tipos de interés y más rápidas se entenderían como un perjuicio para los bancos domésticos, que verían estrecharse sus márgenes a una velocidad mayor de la prevista: “Si el mercado percibe eso, veremos un selectivo más deprimido”.

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