España, al rescate de Marruecos con el aceite de oliva: exporta para compensar su escasez

El mercado marroquí enfrenta una fuerte crisis debido a la disminución de la producción local de aceite de oliva, una situación derivada de una combinación de factores climáticos y económicos

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Los productores nacionales de aceite
Los productores nacionales de aceite de oliva y aceitunas se beneficiarán de la adhesión de Argentina a estándares internacionales que favorecen el acceso a nuevos mercados (Foto: Shutterstock)

A lo largo de la historia, el aceite de oliva ha sido más que un simple alimento; es un símbolo de cultura, economía y tradición en el Mediterráneo. Sin embargo, en Marruecos, uno de los países que también se ha dedicado a la producción de este producto, la situación actual presenta un desafío sin precedentes. Una grave escasez de aceite de oliva ha llevado al país a buscar ayuda en un socio estratégico y cercano: España, el mayor exportador mundial de este codiciado producto conocido como el “oro líquido”.

El mercado marroquí enfrenta una fuerte crisis debido a la disminución de la producción local de aceite de oliva. Esta situación tiene raíces en una combinación de factores climáticos y económicos. La temporada pasada, el país sufrió períodos prolongados de sequía que afectaron los cultivos de olivo en regiones clave como Alhucemas. Esta región, conocida por sus olivares, ha experimentado una notable reducción en su capacidad productiva.

El impacto se ha extendido rápidamente al mercado, donde la demanda supera ampliamente la oferta. Esto ha provocado un aumento en los precios y una tensión en el suministro local. Según fuentes locales, el precio del kilo de aceitunas, base de la producción de aceite, se mantiene elevado, dificultando el acceso a este producto básico para muchas familias marroquíes.

Importación de aceite de oliva desde España

Ante la gravedad de la situación, Marruecos ha recurrido a España para garantizar el suministro necesario de aceite de oliva. Cooperativas agrícolas marroquíes han comenzado a importar aceite español tras obtener las licencias pertinentes de las autoridades locales. Estas importaciones representan un alivio temporal mientras el país intenta estabilizar su mercado interno.

España, líder mundial en la producción de aceite de oliva, está bien posicionada para proporcionar este soporte. Las exportaciones hacia Marruecos son una muestra de la interdependencia económica entre ambos países, consolidando una colaboración histórica en el sector agroalimentario. De acuerdo con informes del medio marroquí Ariffino, se espera que esta medida ayude a estabilizar los precios y garantizar el acceso a este bien esencial para los consumidores.

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Producción de aceite de oliva en Marruecos

Marruecos se ha esforzado por posicionarse como uno de los principales productores de aceite de oliva en la región, pero enfrenta desafíos estructurales y climáticos. La dependencia del agua para el riego y la ausencia de tecnologías modernas en la mayoría de los olivares han limitado la capacidad del sector agrícola para resistir fenómenos como la sequía.

La esperanza de los agricultores radica en la próxima cosecha, que podría traer mejoras gracias a pronósticos más favorables. Sin embargo, los expertos indican que serán necesarias inversiones significativas en infraestructura agrícola y una gestión más eficiente de los recursos hídricos para garantizar la sostenibilidad de la producción en el futuro. En este contexto, las autoridades marroquíes enfrentan una doble tarea: garantizar el suministro a corto plazo mediante importaciones estratégicas y, al mismo tiempo, implementar políticas que promuevan la resiliencia del sector agrícola. Esto podría incluir incentivos para la modernización tecnológica, estrategias de riego más eficientes y el desarrollo de sistemas de apoyo para los agricultores más vulnerables.

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