Los niños fantasean constantemente con ser adultos, con crecer y encontrar un trabajo de lo que más les gusta: futbolista, actor, cantante, médico... suelen ser oficios elegidos por muchos pequeños. Sin embargo, encontramos casos en los que uno de esos niños encuentra su vocación en un ámbito completamente distinto y comienza a desarrollar su creatividad y esfuerzo desde el principio. Este es el caso de Alfie, un joven de 10 años que, junto a su abuelo Roy, ha creado su propio negocio de carpintería de lujo en Wallingford (Inglaterra).
Desde que era muy pequeño, su familia se dio cuenta de que era un niño especial al que no le gustaban las mismas cosas que al resto: “Sus cuatro hermanos son muy deportistas y Alfie se estaba quedando atrás, así que sentí que quería ofrecerle otra opción”, ha explicado su abuelo en un reportaje realizado por la BBC. Alfie siempre había querido hacer algo diferente, por lo que con solo cuatro años comenzó a ayudar a Roy en el taller.
Durante todos estos años, el pequeño ha desarrollado una gran pasión por la carpintería y tiene interés en seguir aprendiendo cosas nuevas cada día. Fue así como la pareja tomó la decisión de fundar Wally Boy a principios de este año, para seguir trabajando juntos en el taller y poder continuar fomentando el entusiasmo de Alfie. Su abuelo se encarga de las tareas que requieren maquinaria pesada, debido a la corta edad de su nieto, mientras que Alfie se ha convertido en un experto en el lijado y el engrase; además, está comenzando a aprenderse sobre el aspecto comercial de la carpintería, lo que le podría beneficiar en el futuro a la hora de desarrollar este empleo, llegando a ser un gran profesional.
blockquote class="twitter-tweet" data-media-max-width="560">Ten-year-old Alfie and his grampy have their very own business in #Wallingford - making & selling chopping boards! 🗜️
— BBC Oxfordshire (@BBCOxford) November 19, 2024
🔊 Hear more about the Wally Boys Workshop on BBC Sounds ⤵️https://t.co/6dWob3jZJW pic.twitter.com/K4nSOeySBZ
El sueño del pequeño carpintero
Todas las semanas, Alfie se esfuerza al máximo para continuar alzando su negocio: “Yo tengo libres los miércoles y domingos y él está aquí todos los miércoles cuando no tiene clases y todos los domingos”, explicó su abuelo haciendo referencia a la gran disciplina que el pequeño demuestra. Ante esta pasión que el niño ha desarrollado, su familia se encuentra sorprendida y contenta: “Él ya ha encontrado su voz. Hace lo que le gusta y estoy muy orgullosa de él por eso”, dijo Emma, la madre de Alfie.
Todo este esfuerzo está dando sus frutos, pues ya han conseguido unos ingresos de más de mil dólares a través de la venta de tablas de cortar de alta gama. Su trabajo está comenzando a hacerse conocido e incluso la Universidad de Oxford les ha realizado un encargo: fabricar una serie de artículos a partir de la madera de un árbol caído en su terreno. De esta manera, Alfie está viendo cada vez más cerca su sueño de ganarse la vida en esta profesión cuando sea adulto, algo que vincula a su deseo de destinar sus ganancias a ayudar a las personas necesitadas: “En el futuro quiero construir fuentes de agua para la gente de África”.
Esta labor está uniendo al abuelo y su nieto, que pueden pasar más tiempo juntos disfrutando de algo que a ambos les apasiona: “Para mí es un placer. Lo recordará durante el resto de su vida, ¿no?”, afirmó Roy. Alfie, por su parte, admite que trabajar la madera le ayuda a sentirse “menos estresado” y que la parte favorita del proyecto que están realizando es “pasar tiempo con mi abuelo”.