Las inundaciones provocadas por la DANA en zonas de la provincia de Valencia, Albacete y Málaga se han convertido en la mayor tragedia ocasionadas por lluvias del siglo, así como el tercer desastre natural más grande de la historia de España. Con 222 muertos, todavía decenas de desaparecidos e incontables daños materiales en viviendas y establecimientos, los estragos se han comparado con la catástrofe ocurrida hace más de 60 años en la misma zona: la riada del Turia en 1957.
Este desbordamiento del río que pasa por la ciudad de Valencia también provocó el fallecimiento de muchas personas (81 según los datos oficiales, aunque varios medios de comunicación hablaban de 300). Las intensas lluvias de aquel octubre, que superaron los 100 mililitros en 24 horas, provocaron la crecida del río y la inundación de gran parte de la ciudad de Valencia. En algunas zonas, la altura del agua alcanzó los cinco metros de altura, provocando pérdidas millonarias. Este desastre motivó la puesta en marcha del Plan Sur de Valencia, un proyecto para desviar el cauce del río Turia y evitar así que en un futuro pudiesen producirse situaciones similares. Sin embargo, con los daños materiales y personales ocasionados por la reciente DANA en Valencia, queda demostrado que el plan, aunque es efectivo, no puede solucionar del todo un problema medioambiental al que nos enfrentamos: el cambio climático, que provoca que cada vez las cantidades de lluvia sean mayores y que puedan repetirse estos temporales.
Algunos políticos han alabado públicamente el proyecto franquista del desvío del río Turia, pero Mikel Herrán, doctor en arqueología y youtuber conocido conocido como PutoMikel, ha explicado en su sección de El Intermedio (La Sexta), ‘Está todo inventado’, cuál es la realidad de esta construcción y cómo se gestionó la riada de 1957.
“Yo sé que hay mucha gente que se piensa que Franco desvió él mismo el cauce del río Turia, como si fuese el mismísimo Hércules, pero el Plan Sur no fue una ocurrencia del generalísimo”, explica Mikel Herrán en el habitual tono irónico y jocoso del programa. El proyecto para desviar el río Turia ya había sido planteado con anterioridad, hacía medio siglo, con la intención de “solucionar el crecimiento urbano de Valencia”. Sin embargo, el plan no terminó de llevarse a cabo hasta que una gran riada puso en evidencia la necesidad de controlar el cauce del río y las consecuencias de urbanizar en zonas inundables.
“Otro desastre natural, muy mal gestionado por el franquismo”
Mikel Herrán ha explicado de qué manera se gestionó en aquel momento una catástrofe similar a la vivida en 2024. En primer lugar, se pone en duda la cifra oficial de víctimas mortales, que “tardaron cuatro meses en darse a conocer y aseguraron que solo hubo 81 muertos, y eso que dos de ellos fueron añadidos en el último momento porque aparecieron semienterrados en una playa”. Pese a ello, “en los periódicos hablaban de más de 300 fallecidos”. Muchas de estas personas serían indocumentadas que vivían en chabolas a orillas del río, ha asegurado Mikel.
La visita oficial al lugar del desastre también se produjo en ese momento, como la realizada el pasado domingo 3 de noviembre a Paiporta, la zona cero de la tragedia, los reyes de España, el presidente del Gobierno y el presidente de la Generalitat Valenciana. Sin embargo, en aquel momento no se produjo cinco días después de lo ocurrido, “sino tres semanas después”.
También en aquel entonces se prometieron una serie de ayudas, como las anunciadas por Pedro Sánchez, presidente del Gobierno, en los últimos días, “pero cinco meses después no habían llegado a Valencia”. El pueblo valenciano quedó indignado y el periodista Martí Domínguez, durante su discurso en las Fallas del año siguiente, denunció “el abandono y la corrupción del régimen”, así como reivindicó el uso de la lengua valenciana.
Este mensaje molestó a Franco, que obligó al alcalde de la localidad a dimitir por haber permitido el discurso y haberse sumado a las críticas. Además, amenazó al medio de Domínguez con reducir el cupo de papel prensa, por lo que también fue forzado a dimitir como director. Tras esto, se aprobó finalmente el desvío del río Turia, “aunque las obras no se empezarían a tramitar hasta cuatro años después”. Pese a que la construcción ha sido beneficiosa para la ciudad de Valencia, Mikel Herrán ha explicado que, según su criterio, en el caso de la riada de este año, “el Plan Sur ha sido más un problema que una solución” porque ha provocado que “se acumulase más agua en la margen derecha, que es la zona que ha sido afectada estos días”.