El truco para quitar la cal de la mampara de la ducha: si haces esto quedará como nueva

La acumulación de cal, que se forma cuando el agua rica en minerales como el calcio y el magnesio se seca en la superficie, puede afectar tanto a la apariencia como a la funcionalidad de la mampara. Primero, porque la cal provoca manchas blanquecinas y opacas que reducen la transparencia y empeoran la estética del vidrio o del material acrílico de la mampara, dando al baño un aspecto descuidado. Si no se limpian de forma regular, estas manchas pueden volverse mucho más difíciles de eliminar con el tiempo.

En segundo lugar, la acumulación de cal puede deteriorar el material de la mampara, reduciendo su vida útil. Las superficies con depósitos de cal son más propensas a rayarse y dañarse, lo que puede llevar a la formación de grietas y a un desgaste prematuro. Además, la presencia de cal y residuos de jabón puede favorecer la proliferación de bacterias y moho, lo que reduce la higiene del baño y puede suponer un riesgo para la salud. Por ello, a continuación te explicamos cuál es la mejor forma de mantener la mampara libre de cal.

Para limpiar la mampara de la ducha de forma eficaz, es importante seguir ciertos pasos que aseguren su mantenimiento y la prevención de manchas de cal y residuos de jabón. Un método casero efectivo es el uso de una mezcla de vinagre blanco y agua. El vinagre, conocido por sus propiedades desincrustantes, ayuda a disolver los depósitos de cal y las manchas difíciles. Para prepararlo, mezcla partes iguales de vinagre blanco y agua tibia en un pulverizador.

Después, rocía la mezcla sobre toda la superficie de la mampara y déjala actuar durante unos 10 minutos. Esto permitirá que los ácidos naturales del vinagre descompongan la cal acumulada y los restos de jabón. Más adelante, con una esponja no abrasiva o un paño de microfibra, frota suavemente para remover las manchas. En caso de residuos persistentes, repite la aplicación y el proceso de limpieza.

Una vez hayas terminado de limpiar, es fundamental enjuagar la mampara con agua tibia para eliminar los restos de vinagre y evitar que queden marcas. Seca bien la superficie con un paño de microfibra seco para evitar que se formen nuevas manchas de agua.

La frecuencia con la que se debe limpiar la mampara de la ducha varía según el uso y factores como la dureza del agua, que puede favorecer la acumulación de cal. En términos generales, se aconseja realizar una limpieza semanal para evitar la aparición de manchas permanentes y residuos de jabón. En zonas con agua de mucha cal, un mantenimiento más frecuente, como una limpieza ligera tras cada uso, ayuda a prevenir la acumulación de restos y a conservarla en buen estado.

En este sentido, para el mantenimiento diario, se recomienda pasar una rasqueta limpiacristales por la mampara después de cada uso. Esto ayuda a remover el exceso de agua y reduce la acumulación de cal y jabón. Asimismo, también se puede emplear un producto anti-cal tras la limpieza semanal para proteger la superficie.