Jesús Soriano es influencer y, según La Vanguardia, camarero desde los 15 años - profesión que empezó a ejercer por necesidad y que hoy, según asegura, sigue ejerciendo “por pasión”. Es el rostro detrás de SoyCamarero, una cuenta a través de la cual denuncia situaciones de abuso en el sector de la hostelería y se ha erigido, de su propia mano, como la voz que se alza contra el malestar provocado por esta industria.
El creador de contenido, nacido en Valencia hace 31 años, empezó su trayectoria en redes contando con humor las distintas anécdotas que le ocurrían detrás de la barra, pero poco a poco le fueron llegando protestas y denuncias de compañeros de oficio, por lo que decidió convertise en “altavoz para expresar el malestar de los camareros en España”. Ahora, entre todos sus perfiles en redes, acumula más de 650.000 seguidores.
Qué una tienda quiera cobrar 8€ por una garrafa de agua de 5 litros a los vecinos afectados por la DANA me parece inhumano y de querer aprovecharse de la necesidad y de la desgracia, al momento pasó voluntarios ofreciendo botellas de agua de forma desinteresada y se les acabó el…
— Soy Camarero (@soycamarero) November 6, 2024
Aprovecharse de la desgracia ajena: cómo no comportarse ante una catástrofe
“Mi objetivo no es demonizar a todos los hosteleros”, pero sí llevar la atención a los “falsos empresarios que quieren hacer negocio a partir de la explotación laboral”. “Deberían avergonzarse un poco y esforzarse por cumplir la ley. Pero sobre todo, recapacitar”, insiste. Y es que parece que a muchos emprendedores les falla justo ese sentido común: la última injusticia que ha denunciado el influencer llega en medio del caos provocado por la trágica inundación fruto de la DANA catastrófica que ha golpeado la costa del Levante, dejando destrozos materiales incalculables y unas cifras lamentables y terroríficas de víctimas mortales y desaparecidos: según ha publicado en un Tweet en la red social X (anteriormente Twitter), una tienda ubicada dentro de la zona afectada por el temporal ha tratado de sacar beneficio de la situación tan precaria y desesperada de los ciudadanos: trataba de cobrar la friolera indignante de 8 euros por garrafas de 5 litros de agua. Por dejar clara la desfachatez de esta cifra: el supermercado Día vende sus garrafas de agua de 5 litros por 65 céntimos de euro; en Mercadona, una de 6 litros cuesta 75 céntimos; en Alcampo, 0,88, .... en ningún supermercado generalista alcanza siquiera un euro.
“Me parece inhumano y de querer aprovecharse de la necesidad y de la desgracia”, comentaba Jesus Soriano en el mismo Tweet. Por suerte, según cuenta, al poco llegó un grupo de voluntarios repartiendo agua gratuitamente a los necesitados, por lo que al comercio “se le acabó el chollo”. “Imagino que luego cuando todo vuelva a la normalidad, tendrá algunos clientes menos.” cerraba @SoyCamarero su mensaje, y es que lo más probable es que la gente recuerde cómo, mientras la mayoría arrimaba el hombro y colaboraba de forma altruista en la recostrucción de una normalidad, los dueños de ese comercio trataron de aprovecharse de la desgracia, impasibles ante la solidaridad que les rodea: miles de voluntarios se han movilizado desde toda la Península para ofrecer su ayuda a los vecinos de Valencia en una muestra de comunidad y preocupación ciudadana por personas que, en la mayoría de casos, ni están relacionados con ellos ni los conocen. Donde unos ven a personas en apuros y necesitados de ayuda, otros ven carteras desesperadas y oportunidades económicas.