El pasado sábado por la tarde, una tragedia golpeó el gimnasio de escalada Climb Up en el barrio de Confluence en Lyon, donde un escalador de 72 años sufrió un accidente mortal al caer desde una altura de 20 metros. Este lamentable suceso ocurrió en un momento en que el hombre, cliente habitual del gimnasio, se encontraba realizando su rutina semanal de escalada, actividad que practicaba hasta tres veces por semana.
Según informó el digital francés La Dépêche, “los bomberos no pudieron salvar la vida del septuagenario” a pesar de sus esfuerzos. En un principio, se especuló que el escalador había elegido no utilizar el sistema de aseguramiento disponible, que juega un papel clave al frenar la cuerda para controlar el descenso de los escaladores. Sin embargo, a través de una declaración pública el domingo siguiente al accidente, Climb Up desmintió esas alegaciones. La empresa afirmó que el hombre “conocía muy bien” las normas de seguridad del recinto y que “utilizaba sistemáticamente el aseguramiento automático”.
Desde el propio gimnasio, Climb Up explicó que la causa del accidente, según fuentes preliminares, fue un error humano. “Desgraciadamente, este reflejo le falló y olvidó enganchar el mosquetón a su arnés”, declararon. La empresa subrayó que la víctima era un escalador experimentado, lo cual hace aún más impactante el desenlace de este incidente. Climb Up es una empresa reconocida en Francia en actividades verticales de interior, y opera un total de 30 gimnasios de escalada en todo el país.
Esta tragedia suscita el debate acerca de la seguridad en deportes extremos bajo techo, y ha llevado a Climb Up a reafirmar su compromiso con la seguridad y revisión de sus protocolos en respuesta a lo ocurrido. “Nuestra prioridad es garantizar un ambiente seguro para todos nuestros usuarios, y revisaremos nuestros procedimientos para evitar que algo así vuelva a suceder”, declararon.
Medidas de prevención y formación para los deportistas
En la actualidad, tal y como ha recalcado el medio anteriormente citado, ha aumentado la práctica de la escalada indoor entre aficionados, al ser un deporte que atrae debido a la emoción y el reto que representa, pero que ahora más que nunca demanda una verificación exhaustiva de normas y procedimientos operativos.
Los protocolos y la formación continua de los usuarios son importantes para minimizar el riesgo de accidentes en este tipo de instalaciones. En este contexto, el accidente no solo resalta los peligros inherentes a la escalada, sino también la necesidad de mantenerse alerta incluso en entornos controlados. Además, el uso adecuado del equipo es esencial, pero los reflejos y la atención de los escaladores también juegan un papel relevante.
En cuanto al accidente, miembros de la comunidad local han expresado sus condolencias a la familia del fallecido y han organizado reuniones para discutir métodos adicionales de apoyo y educación sobre la seguridad en las instalaciones de escalada. Entre los usuarios del gimnasio, esperan que estas acciones preventivas ayuden a minimizar futuros riesgos, honrando así la memoria del escalador con medidas que reflejen su dedicación al deporte.