El radar de lluvias de la Aemet, en directo por horas: así puedes consultar las zonas más afectadas

La situación provocada por la DANA, que ha inundado Valencia dejando a su paso más de doscientos muertos, se ha convertido el caldo de cultivo perfecto para que decenas de personas se dediquen a desinformar, crear y expandir bulos de todo tipo, desde cifras de fallecidos que se lanzan al aire sin ningún tipo de fuente -ni de pudor- hasta falsedades que niegan el cambio climático y ponen en entredicho a la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).

La Aemet, que suele mantener un perfil bajo en sus redes sociales, a pesar de la cantidad de respuestas que reciben sus tuits con información falsa que roza el terraplanismo -cuando no lo defiende-, ha salido para arrojar luz sobre las mentiras que se están difundiendo, como la que afirma que los radares sirven para “desviar las nubes o la lluvia”.

“Esto es falso. Los radares meteorológicos no pueden desviar precipitaciones. Detectan gotas de lluvia, nieve o granizo y sirven para localizar tormentas y seguir su evolución”, aclara el organismo a través de X (antes Twitter), donde también explica cómo funcionan estos radares, que se pueden consultar a través de la web o la aplicación del ente público.

Las herramientas de teledetección, como los radares, son muy importantes para las predicciones meteorológicas a corto plazo, pero ¿Cómo funcionan? El radar envía una onda electromagnética en el microondas y esta interacciona con algún elemento atmosférico, que devuelve otra onda electromagnética. Lo hace del mismo modo que funciona el eco. “Cuando la onda electromagnética interacciona con algún hidrometeoro (lluvia, granizo, nieve) se produce un cambio en la frecuencia en la onda electromagnética y esto lo mide el radar al detectar de nuevo la onda”, explican en un hilo.

La magnitud que mide el radar medir es la reflectividad, que se mide en decibelios. Esta magnitud se modela según la latitud, tipo de lluvia, radar y muchos más factores. Mediante el efecto Doppler, los radares identifican cambios de frecuencia por velocidad de hidrometeoro, para aclararlo ponen un ejemplo, “cuando una ambulancia se acerca más a nosotros oímos su sonido con una frecuencia mayor”. De este modo, obtienen información que les sirve para medir las precipitaciones, que clasifican con una barra de colores en el mapa de su web: los tonos más azulados tienen que ver con nieve y precipitación débil, mientras los más verdes tienen que ver con lluvia más fuerte y granizo.

Otro de los bulos que ha circulado a raíz de la DANA es que el radar que debía captarla no funcionaba. Una mentira que sostenía el pseudoperiodista de extrema derecha Javier Negre, al que la delegación de la Comunidad Valencia de la Aemet desmentía a través de X. “Hola, Javier Negre. El radar de Valencia ha estado funcionando sin ningún tipo de problemas durante todo el episodio. Solo entrando en nuestro Twitter puedes ver tú mismo cómo desde el lunes pasado estamos compartiendo imágenes radar”, contestaban a un video que difundía el bulo, en el se ponen a su servicio para aclararle cualquier duda: “Hemos atendido estos días a decenas de medios, quizás centenares, nacionales e internacionales, y les hemos respondido a todas estas preguntas que uste nos plantea. Amablemente le hubiésemos atendido si usted nos hubiese llamado también.”